Se oponen a la instalación de viviendas a emergencia en Cerro Dragón.
l Rodolfo Capino Valencia
Hasta las últimas consecuencias planean llegar los vecinos de Bajo Molle, quienes se oponen a la instalación de un campamento de familias damnificadas por el terremoto en los faldeos del Cerro Dragón.
Para demostrar su descontento y como una forma de llamar la atención a las autoridades, el lunes y anoche un centenar de vecinos bloquearon el paso a vehículos en la avenida Bilbao, situación que provocó que el tránsito se paralizara por más de una hora.
"Vamos a seguir la movilización hasta que las autoridades desistan de tener un campamento allá arriba. Hoy en todos lados se habla de que es un campamento y creemos que es un retroceso, porque todos hablan de eliminar los campamentos y justamente se quiere crear uno aquí", dijo Jorge Carvajal, dirigente del comité creado por los vecinos para reclamar por la llegada de nuevos vecinos al sector.
Carvajal planteó que no bajaran los brazos hasta que no reciban una propuesta concreta, por lo que manifestó que junto a sus vecinos continuarán las movilizaciones.
"Actualmente se habla de 50 o 100 familias, pero que pueden aumentar porque se pasan los datos, porque así funcionan las cosas en Chile", aseveró Carvajal, quien añadió que "se va a generar un problema social grande en ese sector".
Tras el terremoto de 8.2 grados Richter que afectó a Iquique el 1 de abril se registraron deslizamientos en el Cerro Dragón, situación que significaría un peligro para los vecinos.
"Pretenden ir a dejar a esas personas ahí y eso es muy peligroso por los desprendimientos. Nosotros no pedimos nada más, sólo que no queremos un campamento ahí, por lo que ello implica", indicó el vecino.
Agregó que en las movilizaciones no sólo participan los vecinos de la avenida Reinamar, sino están involucrados las familias de El Rey del Mar, Las Brisas, los Altos del Cerro Dragón, entre otras.
La noche del lunes mientras los vecinos tenían bloqueada la calle, llegaron hasta el lugar los seremis Luis Astudillo, de Vivienda; Mariela Basualto, de Desarrollo Social; y Luigi Ciocca, de gobierno con el fin de conversar con los pobladores.
"Se trasladaron tres seremis para escuchar cuáles son las demandas. Esperamos darle una respuesta lo antes posible y esperamos consensuar con la comunidad cuales sean sus requisitos", aseveró el intendente Mitchel Cartes.
La autoridad regional explicó que los barrios de emergencia van a estar muy bien definidos y con parámetros claros. "Serán sectores cercados, que contarán con los servicios públicos, por ejemplo, baños, una especie de policlínicos, contarán con áreas de esparcimiento para los niños. Contará también con la vigilancia de Carabineros que es lo que mayormente le preocupa a la gente", afirmó Cartes.
Finalizó pidiendo a los vecinos que "entiendan que hay gente en la calle que perdieron sus casas tras dos terremotos". J
l El intendente Mitchel Cartes quiso dejar en claro que la ubicación de todos los barrios de emergencia que se determinen como medida luego del terremoto van en coordinación con los distintos municipios de Tarapacá.
"En este caso estamos haciendo las coordinaciones con el alcalde de Huara, de Pozo Almonte, de Alto Hospicio y de Iquique. Si hay algún alcalde que tiene una aprensión con algún sector, las ideas están completamente abiertas para buscar un mejor lugar para que la comunidad pueda estar más tranquila", aseveró la autoridad regional.