Estadio para Iquique
Controversia causaron las declaraciones del senador Fulvio Rossi respecto al proyecto para mejorar el estadio Tierra de Campeones. El legislador asegura que los $4 mil millones que comprometió el Estado como parte de los proyectos Bicentenario en el anterior gobierno de Michelle Bachelet fueron redestinados por la administración anterior. Pese a lo tajante de las declaraciones, lo cierto es que si Iquique carece de un estadio, está lejos de ser responsabilidad del gobierno pasado.
Esto porque desde el 2008, anterior gobierno de la Concertación y administración municipal de Myrta Dubost, que existe una polémica de cuál es la mejor opción para un recinto deportivo; al tiempo los iquiqueños vemos como todas las ciudades importantes ya cuentan con un estadio con estándares Fifa, mientras que Iquique, incluso perdió la posibilidad de ser sede de la Copa América.
El principal escollo es la discusión sobre la necesidad de levantar un nuevo recinto o mejorar el actual; además del aforo que debe contemplar el proyecto.
En agosto de 2013, el Instituto Nacional del Deporte aprobó el diseño para mejorar el Tierra de Campeones, donde el costo total de la obra sería de 12 mil millones de pesos, de los cuales $4 mil millones serían aportados por el IND y el resto por el Gobierno Regional de Tarapacá, a través del Consejo Regional. El estadio sería con capacidad para 12.193 personas, todas con butacas, iluminación para transmisión HD, megafonía, circuito cerrado de televisión, tablero marcador LED y un gimnasio techado multiuso, entre otras cosas.
Pese a que ni siquiera en los partidos de Copa Libertadores del CDI, donde jugaron con equipos de la categoría de Vélez Sarsfield y Peñarol de Uruguay, los iquiqueños agotaron los tickets, muchos se opusieron al recinto porque su capacidad no estaba acorde a la población de Iquique.
Uno de ellos fue el municipio local, donde acusaron que el proyecto no respondía a la idiosincracia regional y a las necesidades de la ciudad, por lo que no cedieron en la entrega del recinto para ejecutar la obra. Todo esto en un momento donde las elecciones presidenciales se acercaban y el estadio formaba parte de un compromiso del anterior gobierno.
Hoy no tenemos estadio, tampoco proyecto, pero lo peor de todo es que las discusiones son las mismas que hace 7 años. Ojalá y por el bien de los tarapaqueños, nuestras autoridades puedan ponerse de acuerdo para que la Tierra de Campeones cuente con el recinto deportivo que se merece.