A degustar el rico mote con huesillos en la Plaza Prat
Cuando el calor está en su máximo esplendor no hay nada más refrescante que disfrutar del tradicional mote con huesillo, pero durante el periodo invernal no es tan común que los iquiqueños prueben de esta bebida.
Pero verdad sea dicha, nadie dijo que con el frío no se puede tomar mote con huesillo y en la plaza Arturo Prat lo tienen bien claro.
Así lo corrobora Andrés Monardes, que ya por 8 años está ubicado cerca de la torre del reloj para vender un buen vaso de mote con huesillos, en su carrito denominado 'El gustito', donde sirve varios vasos diarios.
'El secreto es la canela, el clavo de olor y saber darle el gusto del azúcar, el balance, ese es el secreto', relata con la confianza que le dan los años de experiencia.
Monardes trabaja desde las 10 de la mañana y hasta las 17 horas en esta época y hasta tarde en el verano junto a su esposa, Aurelia Navarro y llama a los iquiqueños a aprovechar de disfrutar del mote es esta época del año con la mejor de las recomendaciones. 'Jamás me han reclamado por un vaso con mote con huesillo, porque son muy buenos', concluye.
La competencia está bastante cerca, pues a 10 metros más allá está el puesto 'Los Nonitos', de Daniel Vidal y su esposa Norma Romero.
'En verano es muy bueno, porque cada cual tiene su receta propia, ese no se qué de cada puesto', explica Daniel, quien aclara de inmediato que el secreto del sabor del brebaje no lo entrega, aunque si explica uno de sus ingredientes.
'Tengo clientes antiguos, de mucho tiempo. El secreto es de familia, yo estoy en la plaza Prat desde hace 3 años, pero mi familia trabaja en esto desde hace 50 años y lo único que voy a decir es que a la olla se le pone corazón, además de los otros ingredientes', explica.
Vidal invitó además a los iquiqueños a aprovechar el tiempo pues en el verano baja el calor pero hay mucha fila para poder comprarlo, mientras que esta época es posible disfrutarlo muy rápido.
Los precios son económicos, pues los vasos parten desde los 500, 600 y 700 pesos y llevan un huesillo, dos y hasta tres de ellos, alcanzando el más grande para medio litro del popular jugo que en el verano baja el calor y en invierno alegra el corazón. J