Por estos días se desarrollan obras de reposición de aceras en el centro de Iquique, espacios que hace largo rato cumplieron su vida útil.
En los trabajos interviene el Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) y considera una inversión de 993 millones de pesos, recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, FNDR. La iniciativa comprende 15 tramos de aceras del centro de la ciudad y una extensión de 9.246 metros.
No cabe duda que la dimensión de esta inversión y obras en varias arterias, cambiarán radicalmente la ciudad. Se trata de sectores con alto tráfico peatonal, al tener varios comercio, oficinas de servicio y espacios públicos como plazas a lo largo de su extensión.
Es entonces, un importante avance, considerando se intervienen calzadas que llevan años de abandono. Es así que se reparará la manzana de Ramírez, Serrano, Obispo Labbé; Vivar, entre Sargento Aldea y Latorre, así como Ramírez, Thompson y Latorre, además de Tarapacá.
La capital regional presenta un evidente mal estado general de estos espacios públicos en parte por una falta de decisión sobre qué institución debía realizar las inversiones, ya sea Serviu o municipio, situación que relantizó los trabajos por muchos años.
Si hoy tenemos caminos urbanos y aceras en mal estado no es por culpa de las administraciones actuales, sino de sucesivos errores, omisiones y falta de planificación.
Un trabajo que puede parecer menor, genera un impacto positivo en la población y para los visitantes, que en el caso de Iquique no es un tema menor, considerando que se trata de una ciudad turística.
No obstante los vecinos y peatones del centro esperan que se intervenga calle Tarapacá, que es el centro neurálgico de la ciudad y la que más problemas presenta.
Las autoridades anunciaron que también están iniciando otros proyectos para arreglar las aceras de otros sectores de la ciudad. Estas iniciativas son importante para mejorar la imagen que debe tener la capital regional.