Gestión de riesgos
Probablemente, el punto de inflexión más importante para la Oficina Nacional de Emergencia, organismo dependiente del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, haya sido el terremoto y posterior maremoto, ocurridos el 27 de febrero de 2010. La crisis más grande que haya sufrido nuestro país en términos de catástrofes naturales en su historia moderna, también puso en evidencia los problemas y virtudes de sus sistemas de reacción y remediación.
De ahí en adelante la mirada a la Onemi fue distinta. Más allá de los juicios técnico-políticos que surgieron tras el destructivo evento de hace más de cuatro años, el hecho dejó sobre la mesa la necesidad de analizar cómo se podía perfeccionar el sistema de emergencias en nuestro país, lo que se fue realizando de manera progresiva hasta hoy.
Sin embargo, el cambio más profundo fue formalizado ayer por la Presidenta Michelle Bachelet, quien firmó el proyecto que crea el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias, que reemplazará a la actual Onemi.
Las catástrofes ocurridas en Valparaíso con el gran incendio o los terremotos del 1 y 2 de abril en Tarapacá y Arica Parinacota, pusieron nuevamente a prueba el funcionamiento de los sistemas de emergencia y se transformaron en una nueva base para la modificación de la institucionalidad nacional en este ámbito.
El nuevo Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias pone un fuerte énfasis en la prevención, involucrando además a las empresas encargadas de entregar servicios básicos, uno de los puntos críticos de los recientes eventos. La gestión de emergencia y recuperación convoca además, el protagonismo de instituciones regionales, no sólo desde el poder central. Esto permitirá también revisar y fiscalizar procedimientos a nivel regional y provincial.
Se busca de esta manera, establecer una institucionalidad práctica, funcional y eficiente respecto a la gestión y la prevención de las emergencias, que evidentemente, ha ganado en experiencia y en capacidad para enfrentar contingencias difíciles.