Uun matrimonio fue víctima de un robo mientras dormían en la madrugada, cuando desconocidos ingresaron a su vivienda, para sustraer un automóvil, computadores, electrodomésticos, un piano, televisores y especies de la empresa de la familia.
Cuando faltaban 10 minutos para las seis de la mañana, Miguel Valenzuela Arredondo, de 70 años, se levantó y al dirigirse al acceso principal de su casa vio que la cartera de su esposa, Lidia Carrasco Zepeda, estaba tirada en el antejardín, faltándole algunos objetos de valor.
Robo
Valenzuela, asustado caminó rápidamente a su dormitorio para avisarle a su señora, de 67 años, que habían sido víctimas de un robo. Luego procedió a revisar cada rincón de la casa, adviertiendo que los ladrones habían sustraído otras pertenencias, todas avaluadas en más de cinco millones de pesos.
"Me dijo inmediatamente que llamara a Carabineros y cuando estoy a la espera de que me contesten, me di cuenta que faltaba el microondas en la cocina, luego caminando me percaté que faltaba los televisores y el piano", contó lamentándose la dueña, quien por sobre todo estaba preocupada.
"Nos durmieron"
Aún triste, ella insistió en la idea en que junto a su esposo fueron dormidos por los individuos con alguna sustancia somnífera, porque no entiende cómo no despertó cuando los delincuentes ingresaron a su dormitorio y por varios minutos revisaron los cajones del clóset, mesones y escritorios.
"Ellos entraron al dormitorio y nos echaron algo para que nos quedáramos dormidos. Yo tengo el sueño ligero y por cualquier cosa despierto, por eso creo que nos echaron algo. Hasta cuando la vecina mete ruido me doy cuenta y despierto", dijo Carrasco.
Luego de revisar la vivienda, la preocupación de la pareja fue el automóvil, que ya no se encontraba fuera del inmueble. "Cuesta dos millones y medio de pesos", dijo consternada la dueña de casa, quien desde el robo sufre calambres en sus piernas, costándole caminar.
Estando en el antejardín notaron que la reja había sido forzada para ingresar a la vivienda, entre las 3.30 y 5.30 de la mañana, según los cálculos de la pareja. "Antes de las tres no pudo haber sido porque mi vecina de al frente aún estaba despierta y habría escuchado", contó la dueña de la casa, quien teme represalias de los ladrones.
"Estoy preocupada y nerviosa porque temo que estos tipos vuelvan a la casa para robar nuevamente", comentó Carrasco.
Carabineros
Carabineros llegó al lugar para constatar lo ocurrido en el pasaje Dolores ubicado en el sector sur de Iquique, sin embargo no pudieron ingresar al inmueble, porque no tenían orden de un fiscal para hacerlo y realizar el peritaje correspondiente dentro de la casa.
La hipótesis de los afectados, de que fueron dormidos, es materia de investigación para los uniformados. J