Las colaciones escolares pueden convertirse en una verdadera complicación para los padres que buscan entregar una alimentación sana y simple a sus hijos. Los altos índices de obesidad infantil demuestran que esta tarea no se lleva siempre a cabalidad, ya que en la mayoría de los casos lo delicioso y fácil prima por sobre lo saludable.
La directora de Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad Santo Tomas Sede Iquique, Claudia Melin, destacó que los niños en esta etapa están en un proceso de ansiedad por el hecho del comienzo de las clases y muchos de ellos salen de sus casas sin tomar desayuno.
"Es primordial que los chicos tomen su desayuno para que se puedan mantener concentrados y con un buen rendimiento en el colegio", dijo.
Melin recomienda que al momento de enviarle meriendas a sus hijos, los padres consideren una botella de agua o jugos naturales, además de frutos secos, ya que es muy importante el consumo de estos debido a que son un buen alimento para el cerebro por su alto contenido de vitamina B.
"Es importante considerar en las colaciones las frutas y verduras, por ejemplo el plátano, porque entrega un alto contenido de energía y potasio a los alumnos, ya que en ciertas ocasiones deben sobrellevar largas horas de trabajo y estudio. En el caso de las verduras, una opción es enviarles palos de apio o zanahoria los cuales son bastante agradables de consumirlos", dijo la especialista.
Melin explicó la importancia de que los padres incentiven la actividad física a sus hijos, estimulando la vida al aire libre, haciendo uso de los espacios públicos que entrega nuestra ciudad. J