Acusan a dos menores de asaltar con electroshock
Una pareja de jóvenes de 17 años fueron detenidos tras un presunto robo con intimidación en el sector centro de Iquique.
Los hechos ocurrieron pasada la medianoche de ayer, cuando un taxista acusó ante efectivos de Carabineros, que fiscalizaban un local de expendio de bebidas alcohólicas en calle Tarapacá, una supuesta riña que a esa misma hora ocurría en la esquina de Amunátegui con Thompson.
En el lugar, los funcionarios policiales se encontraron con tres personas, dos hombres y una mujer, quienes denunciaron haber sido víctimas de un robo con violencia por parte de dos individuos, los que, mediante la aplicación de un inmovilizador eléctrico, procedieron a sustraerle un celular y un gorro.
Con la descripción entregada por las víctimas, Carabineros logró divisar a los jóvenes en la esquina de Barros Arana con Sargento Aldea.
Tras verificar su identidad los uniformados se percataron que portaban un aparato de electroshock, un gorro y el celular robado, procediendo a detenerlos.
FORMALIZACIÓN
Los menores fueron formalizados, quedando con arresto domiciliario, aunque la Fiscalía solicitó internación provisoria.
"Por ser un peligro para la sociedad. Participaban en un grupo de pandillas de ocho personas, utilizando medios riesgosos para la salud. Aparentemente, esto habría dado lugar a lesiones leves. Ellos estaban juntos, llegaron juntos, actuaron juntos y se fueron juntos", dijo el fiscal Juan Zepeda, aunque la defensa asegura que no se conocían.
Natalia Andrade, defensora penal juvenil, cuestionó la existencia del asalto, asegurando que uno de los jóvenes solo reaccionó ante un supuesto insulto verbal.
"Ellos indican que no se conocen, no se habían visto hasta la madrugada y no tienen relación alguna. La solicitud del fiscal resultaba desproporcionada dadas las características personales de estos adolescentes. Son jóvenes, sin antecedentes penales, sin causas pendientes, y además escolarizados", indicó.
De hecho, el juez determinó que los menores podrán seguir acudiendo a clases, entre las 20 y 23:45 horas, debido a que estudian en la noche.
A pesar que estos aparatos son vendidos en distintos lugares de la ciudad, el suboficial mayor de Carabineros, Mario Barrera, encargado de la autoridad fiscalizadora de Control de Armas de Iquique, dijo actualmente en la ciudad no hay ningún local certificado para venderlos. "Una vez terminada la investigación, este elemento va a ser destruido", aseguró, respecto al paralizador eléctrico. J