Migración e integración
Iquique, y en general todo el Norte Grande, es una zona donde la multiculturalidad marca su conformación. Esta característica no solo está dada por tratarse de una inmensa región bifronteriza, sino porque antes de convertirse en un territorio anexado al país, en ella convivían ciudadanos provenientes de Sudamérica, Europa y Asia.
Los aniversarios de independencia de Colombia y de Perú (20 y 28 de julio) nos permiten reflexionar sobre el aporte que entregan cada día los migrantes y de cómo trabajar para erradicar el racismo y la xenofobia que muchas veces se apodera de foros y diálogos en las redes sociales, transformándose en un peligroso caldo de cultivo para hechos de violencia.
El mundo apunta a romper las fronteras de todo tipo y a condenar duramente estas acciones, por lo tanto ir en sentido contrario es, por decir lo menos, descabellado.
Según cifras del INE, Tarapacá cuenta con 30.427 extranjeros, más del 10% de su población y donde el 88% es menor de 44 años.
Un ejemplo de integración son las escuelas públicas de la ciudad, donde dentro de sus aulas hay gran presencia de niños extranjeros, quienes sin saberlo están aportando a generar lazos de convivencia con los escolares chilenos.
Además, en fácil notar como los inmigrantes han sabido ganarse un espacio y aportar a la economía y al desarrollo de la región. Incluso en Iquique existen muchos ejemplos que dan cuenta que su contribución no solo se limita a labores de servicio, sino que han forjados prósperos negocios y con ello aportado a la generación de empleo.
El fin de semana fue el turno de los residentes colombianos y en los próximos días será la colectividad peruana la que celebrará su aniversario patrio con una serie de actividades culturales y tradiciones, las que sin duda alguna se han convertido en un atractivo turístico para Iquique, lo que se reafirman cada verano con el festival de colectividades, evento que no solo es visitado por los iquiqueños, sino que por chilenos de otras regiones del país.
Es necesario crear conciencia del aporte que hacen los extranjeros y no quedarse con hechos delictuales puntuales, que representan un porcentaje mínimo en la estadística.