Cuando se dice que la región lidera en los casos de Infecciones de Transmisión Sexual, se viene a la mente una serie de rankings negativos donde pasa lo mismo.
No obstante esta es una realidad en las zonas extremas de un país centralizado, donde la calidad de la educación, salud y de infraestructura no tienen nada que ver con lo que ofrece la región metropolitana.
Por esto es necesario que la misma comunidad tome conciencia del lugar que ocupamos y que desde esta surjan conductas que apunten a mejorar y sobresalir por lo bueno.
De acuerdo al último informe del Minsal, en 2013 se confirmaron 67 casos de VIH, de los cuales 48 afectaron a hombres y 19 a mujeres, ocupando el segundo lugar tras Arica.
En el caso de la sífilis, la región ocupa la primera posición en Chile con 55 casos cada 100 mil habitantes. En los casos de gonorrea, Tarapacá es la segunda tasa más alta del país con 34 casos cada 100 mil habitantes. En las dos últimas, la mayor cantidad de personas se asocia a nacionales y la tasa de extranjeros que la poseen no llega al 9%.
De los factores principales para que el contagio se masifique está la poca conciencia de las medidas de autocuidado, que se demuestra con los infectados con VIH de la región, de los cuales el 51,7% aseguró que nunca usó preservativo.
Si bien las campañas del Gobierno aún presentan un sesgo referente a su enfoque en las parejas homosexuales, lo cierto es que las cifras avalan que estos últimos son los que más conciencia tienen respecto a los efectos de no tomar las medidas.
Por lo anterior, es necesario transparentar estas problemáticas y no quedarse con sesgos que evitan progresar hacia una sociedad más sana.
Si bien el ejercicio de la prostitución es un problema de salud pública, ha estado desde siempre en las sociedades. Lo importante es contar con un Estado que se preocupe de que esta actividad se ejerza en forma segura.
A la vez generar planes más atractivos de concientización hacia los jóvenes, con metodologías que impulsen interés en ellos y que les permita interiorizar las consecuencias de una sexualidad irresponsable. Es necesario que todos en Tarapacá, incluido el Estado, tomemos conciencia y apuntemos a salir de esta lista negra.