La reconstrucción del Puerto de Iquique es una de las obras de mayor impacto para la región. El mar es uno de los recursos, o quizás el recurso más importante que tiene Chile, que le permite conectarlo no solo con el mundo sino también con nuestras mismas regiones, en una vía libre y sin las restricciónes de nuestra accidentada geografía.
Es por esto que todos los sectores están pendientes de la licitación del terminal local, que intenta poner a disposición el Terminal 1 lo antes posible, para lo cual se requeriría un año para las obras.
Si bien esto no deja contentos a aquellos que buscan una obra monumental y acorde a los desafíos portuarios del futuro, al menos parece lógico que en una primera etapa solo se deje el puerto operativo, más aún cuando hay recursos derivados de las aseguradoras.
La inversión que superaría los 70 millones de dólares (aunque no está definida) y que busca reactivar la operatividad del Terminal Nº1 (sitios 1 y 2) dañado durante el último terremoto, el segundo semestre de 2016. La obra contempla el uso de 1.280 micropilotes, los cuales se instalarán mediante perforación a profundidades de hasta 34 metros bajo el mar y a 1,5 metros de distancia cada uno.
Asimismo, una segunda etapa que considere ampliar el calado para dejarlo en igualdad de condiciones con el terminal de ITI, que incluso antes del terremoto tenía el 90% de las operaciones del Puerto de Iquique, sin duda que también es necesario.
Las obras que comenzarán en enero de 2017, implican el dragado a 15 metros de profundidad, permitiendo así el arribo de naves de hasta 380 metros de eslora (Post Panamax). Las obras concluirán en marzo de 2018.
Si bien es importante contar con autoridades locales que estén pendientes y conscientes de la importancia que tiene el puerto para el desarrollo de Tarapacá, los esfuerzos deberían enfocarse para que la tercera etapa del proyecto que ofreció el Gobierno se ejecute, sobre todo porque estará sujeta a las proyecciones de carga y a la decisión de la concesionaria, lo que involucraría que el terminal se extienda 250 metros y que permitiría el arribo de naves Triple E y Post New Panamax.