Editorial
Catastro frutícola
El Centro de Información de Recursos Naturales del Ministerio de Agricultura, inició un catastro frutícola en ocho regiones del país en forma simultánea.
La inversión es de $500 millones y ya está en marcha en Arica, Tarapacá, Maule, Biobío, La Araucanía, Los Ríos, Los Lagos y Aysén, que en el caso de esta última es inédito.
Aunque no existe una conciencia de la relevancia de este catastro, al menos en la zona norte, donde el grueso de la población se encuentra en zonas urbanas, es fundamental para el país y también para Tarapacá, donde no se realizaba un trabajo de este tipo hace 35 años.
Esta muestra, financiada por la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) contará con 10 encuestadores que ya están tomando los datos a diferentes productores agrícolas de localidades como Pica, Miñe Miñe y Quipisca, entre otras, y que cuenten con terrenos que tengan plantaciones mayores a 0,5 hectáreas.
En este sentido la información será vital para tener una idea más certera del impacto de esta actividad en la región de Tarapacá y también permitirá que el estado cuente con los datos necesarios para poder potenciar la agricultura en el desierto, que por muchos años ha sido subvalorada desde el punto de vista de no generar producciones a gran escala.
En este sentido, muchos de los pueblos han sufrido el despoblamiento a partir de la segunda mitad del siglo XX y esta será una ocasión para comparar la variación en la producción en los últimos 35 años, ya que los datos actuales, del ultimo censo agropecuario del 2007 solo entregan información general, respecto a las hectáreas plantadas.
La medición también es un aporte en el sentido que obtiene información de productores que tienen sobre media hectárea, lo que si bien en la zona sur de nuestro país es poco relevante, cuando se trata de productores en el oasis de Pica este terreno tiene mayor validez.
El catastro es un inicio, desde el punto de vista de ser una herramienta para el trabajo futuro y será necesario que las autoridades locales puedan utilizarla de la mejor forma para levantar esta área productiva que pude dar una mayor autonomía alimentaria a Tarapacá.
"será vital para tener una idea más certera del impacto de esta actividad en la región de Tarapacá".