Desde Cuba y Colombia la Orquesta Regional se nutre de calidad musical
Hija de la tierra que le dio vida al compositor e intérprete cubano Compay Segundo, Indira González apostó por la música clásica para forjarse un camino que la ha llevado a lugares tan lejanos de su isla caribeña.
Una de estas tierras es Iquique, en donde trabaja desde hace año y medio en la Orquesta Regional de Tarapacá como intérprete de violín, instrumento que toca desde que tenía siete años y que le dio la oportunidad de moverse entre países, idiomas y muchas culturas.
"Yo venía de trabajar cinco años en la orquesta de Quito, Ecuador y me enteré a través de una amiga directora que acá en Iquique estaban haciendo audiciones", cuenta Indira y añade, que en esa fecha envió un video a modo de audición ya que le interesó la oferta en la región.
Lo nuevo
"No tenía idea de cómo era la ciudad, sólo que estaba al norte de Chile y que era famosa por sus movimientos telúricos", recuerda entre risas Indira.
La cadencia y melodía de su acento hace que rápidamente llame la atención cuando habla. "Me vine sin pensarlo y, la verdad, no me arrepiento para nada", dice Indira, quien se licenció como músico en Cuba, con el perfil de violinista.
Para la artista el comienzo fue un proceso duro porque debió adaptarse de forma rápida a otra cultura y otro equipo laboral pero de todo este recorrido ella destaca el buen recibimiento que como extranjera Chile le da.
Sobre cómo es el trabajo con sus otros compañeros, que en su mayoría también son extranjeros, Indira describe que son una gran familia.
"Nos apoyamos entre todos y eso es muy bueno para nosotros porque en este buen ambiente nunca nos sentimos solos, a pesar de estar lejos de nuestra familia", manifestó la músico cubana.
Desde bogotá
Las frías temperaturas y las torrenciales lluvias de Bogotá en Colombia quedaron atrás luego que Indira Reinel, intérprete de corno en la Orquesta Regional, viera en Iquique un nuevo proyecto de vida que le daría continuidad a profesión.
"Llegué primero a Santiago y como siempre voy con mi instrumento, hice algunas audiciones y vi que acá en Chile tenía la posibilidad de seguir tocando", refiere Reinel y agrega que también audicionó para Temuco y Valdivia y tocó con varios amigos músicos en Santiago antes de ser seleccionada en Iquique.
"En Colombia veía que únicamente conseguía trabajo más rápido en el área de la educación y yo sentía que podía seguir tocando, sin embargo en mi país es complicado conseguir empleo así", manifiesta.
Así, con más opciones al sur de América, Reinel decidió quedarse definitivamente en Chile y viajar hasta Iquique.
"Acá es más tranquilo y esto es algo que se aprecia mucho y que amaña. El ritmo de vida es más relajado y para mí eso es importante porque Bogotá es muy estresante", apunta.
Para Reinel es bastante común en la vida de los músicos compartir con colegas de otros países, tal como sucede en la orquesta que tiene talentos provenientes de Venezuela, Perú y, por supuesto, Chile.
"Gracias al trabajo, a los festivales y a las universidades uno se acostumbra a esta interacción cultural. Es encantador y súper genial. Aquí todos somos latinos y hay muchas cosas en común como el carácter, la alegría y cómo disfrutamos la música", concluye.