Es paradójico que en Chile, se defienda un sistema educativo que es ideológico y que se critique que al querer modificarlo se ideologice. A saber, la educación no es neutra; eso se enseña a cada estudiante de pedagogía o ciencias sociales en primer año en la universidad, claro en una universidad seria.
Las directrices educativas emanan del poder que toma el control del Estado, más resulta interesante que las políticas educativas de Chile en el siglo XX fueron elaboradas para aumentar, primero el analfabetismo y luego la cobertura; 1928, 1968.
Es la dictadura militar que cambia la administración de los colegios públicos a las municipalidades, así como también la dependencia laboral de los profesores. Por otro lado, surgen los colegios particulares subvencionados, todo ello en 1981. En Alto Hospicio, en tanto, surgen a partir de 1992 y se reproducen.
¿Si la educación es ideológica, los colegios también? claramente que sí, sólo basta revisar sus nombres, la misión, la visión y sus decisiones de gestión y currículum, de hecho el concepto libertad de enseñanza, lo es y los gobiernos de la concertación, solidificaron el modelo de la dictadura militar.
El financiamiento compartido, surge en el gobierno de Frei-Ruiz Tagle y el aumento de colegios particulares subvencionados y universidades privadas van en aumento en la década del noventa en adelante.
Muchos militantes de la Concertación y la Derecha son dueños de universidades y de colegios particulares subvencionados, por tanto, defienden este espacio.
En 1996, se inició una reforma educativa en Chile, aquella que supuestamente llevaría al país al desarrollo. Solo basta leer la declaraciones de la época, pero ésta llevó al fracaso de contenidos y a los movimientos estudiantiles del 2006 y 2011, dado que profundizó y legitimó el modelo privatizador de la educación y con ello el olvido de las promesas electorales de 1989 en que se decía que la educación volvería al Estado.
"¿Si la educación es ideológica, los colegios también? claramente que sí, sólo basta revisar sus nombres, la misión, la visión y sus decisiones de gestión y currículum".
Patricio Rivera,, historiador UTA