El deporte que atrapa a amantes del mundo militar
Es el Airsoft, actividad de estrategia basada en la simulación marcial donde sus practicantes cuidan todos los detalles, desde las armas hasta las vestimentas.
A principios de este año, extrañeza generó en los visitantes de la oficina salitrera Santa Catalina de la región de Tarapacá unos residuos de carácter bélico que fueron hallados en este sector de la provincia de El Tamarugal.
Lo que no sabían es que se trataba de parte de la ornamentación de practicantes de Airsoft, disciplina reconocida por el Instituto Nacional del Deporte en el 2011 y que ya suma varios adeptos en la región de Tarapacá, que cuidando cada detalle emulan las experiencias de enfrentamientos y campañas militares.
Si bien los residuos encontrados en la oficina salitrera fueron parte de restos dejados por airsofters descuidados, según dicen sus mismos adeptos, generalmente lo común es que pidan permiso en lugares desérticos de la región, donde despliegan toda su creatividad e indumentaria que no tiene nada que envidiarle a los implementos ocupados por el Ejército chileno.
"Somos alrededor de 10 equipos los que hay acá en Iquique. Los lugares donde nosotros jugamos es en Alto Hospicio, detrás del autódromo. Ahí tenemos una cancha de Airsoft, pero cuando salimos a los interiores (de la región) vamos a La Huayca, donde una persona nos arrienda el terrenos, vamos a Quillagua, entre otros lugares", dice Sergio Molina, airsofter del Team Gurkhas, más conocido como Thor en este mundo de emulación marcial.
En el relato de Molina, el militar de profesión contó que la finalidad del juego es simular un combate ficticio, donde pueden haber 3 equipos o bando e incluso mercenarios.
No por nada en noviembre organizarán la Copa Némesis, torneo organizado por su equipo y donde irán cientos de participantes de la zona norte.
Réplicas
Una muestra más que en el Airsoft se cuida cada característica de la actividad marcial, caso similar a lo que sucede con las réplicas de los rifles ocupados en las "campañas". Armamento que si no fuera por su puntas naranjas (medida reglamentaria para diferenciarlos de los reales) pasarían desapercibidos como fusiles de guerra.
"Están saliendo más menos unos $180 mil el arma. También las tiendas de airsoft comercializan granadas de humo y granadas de ruido, obviamente que tienen que estar certificadas por las tiendas", indica.
Los airsofters no dejan nada al azar, por lo mismo los integrantes de este deporte en la región se juntaron un tiempo atrás para definir el modus operandi y las reglas que debían seguir cada entusiasta de la actividad. Dentro de las cuales está el no mostrar el armamento a cualquier persona y otros cuidados hechos para no alarmar a personas no practicantes.
"No se puede trasladar uno con equipamiento y si se anda con los pantalones y las botas, los pantalones tiene que estar sobre la bota y una polera y una chaqueta que no tenga nada que ver con el juego", asegura.
El espacio que ha ganado el Airsoft en Iquique también se puede apreciar en otras regiones de la zona norte. Así lo confirma Francisco Cerda, de la tienda Insufar, quien vende insumos para la práctica de este deporte en nuestra ciudad y también en Antofagasta.
"De a poco empezó y ahora lo conoce mucha gente. Existen torneos masivos, donde incluso viene gente de Argentina y Bolivia", acota el vendedor, el que afirma que la calidad de los productos para este deporte es tan buena, que incluso integrantes del Ejército le compran vestimenta de Airsoft para sus campañas.
"Somos alrededor de 10 equipos (...) acá en Iquique".
Sergio Medina,, airsofter conocido como Thor e integrante del Team Gurkha."