Los productos americanos en La Quebradilla
En la explanada de tierra que reúne a dos mil feriantes hay para regodearse "vitrineando".
La popular feria La Quebradilla que reúne a más de dos mil feriantes, convoca a miles de personas que ataviados con carritos de compras, coches de guaguas y en algunos casos, con la familia entera llegan los fines de semana a comprar mercadería, ropa y "cachurear" por los diversos pasillos del lugar.
Si usted es de esas personas que siempre anda buscando cosas novedosas y únicas, en el puesto número 14 frente a la calle Los Tumbos, se topará con diversos artículos llamativos como cuadros, relojes, almohadas, alcancías, ceniceros, chapas y patentes de adornos traídos desde Estados Unidos".
Éstos productos son comprados de forma directa por la misma locataria, así cuenta Leonor Barrios Gónzalez, feriante de 64 años de edad, que pertenece a esta agrupación hace cinco.
Con un paño en la mano ella va sacando y limpiando todos sus productos a mostrar mientras narra que es la única feriante que vende "estos artículos novedosos de gran calidad".
"Yo viajo dos veces al año a Estados Unidos, en febrero y agosto y ahí me surto de productos por todo el resto del año. Pronto ya empezaré a sacar todas las cosas nuevas que tengo para Navidad", indica.
Leonor comenta que esta idea de traer cosas americanas a la feria se le ocurrió cuando ella se encontraba de viaje con sus hijos. "Para solventar de alguna forma el viaje y que no me salga tan caro empecé primero a traer cosas pequeñas y después ya compraba más cantidad. Como no tengo la posibilidad de retirar todo de inmediato porque no se puede llegar y pasar las cosas hay que pagar impuestos, yo encargo todo a un dealer (distribuidor) y éste me va enviando las cosas poco a poco en la medida que yo tengo dinero".
La mujer que se coloca desde las seis de la mañana todos los fines de semana, saca sola y de a poco todas sus artículos. Señala que lo que más vende son las chapas de metal y las patentes de adorno. "Algunos de éstos (productos) se encuentra en la Zofri pero la calidad es distinta porque los americanos tienen otro estándar de calidad para sus cosas".
"Yo vendo los verdaderos cuadros 3D y no las copias que traen de otros lugares. Mis cuadros valen tres mil pesos y tengo de diversos tamaños.
Esta iquiqueña que hace 16 años vive en Alto Hospicio, es feriante hace nueve años. "Yo empecé vendiendo juguetes que compraba en zona franca, después pasé a los libros y ahora estoy en este rubro. A mi me gusta lo que hago, tengo mi público cautivo que me visita una vez al mes", sentencia.
2.000 comerciantes, reúne esta popular feria.
500 a más productos, se encuentra en este lugar a precios muy baratos.
Claudia Bermúdez
cronica@estrellaiquique.cl