El sindicato de los trabajadores de "Homecenter-Sodimac", el más grande del país, pedía un 7% de reajuste y un bono por término de conflicto de $ 500 mil.
La empresa les ofrecía un 3,5% y $150 mil, respectivamente. Cuento corto: Tras casi un mes de paralización, se le pone término con un reajuste del 2% y un bono de $ 200 mil. Llevando ya 11 días de huelga, algunos "compañeros" congresistas, como Vallejo, Boric y Jackson, entran en escena, visitando a los trabajadores paralizados y/o solidarizando con ellos a través de las redes sociales, a sabiendas que nada pueden hacer, excepto llamar la atención. ¿Presentar un proyecto de ley o "de acuerdo" al respecto? ¿Interceder personalmente a favor de, ante el empleador? Ni lo uno ni lo otro, pues se trata de "un problema entre privados" y lo prohibe la Constitución (art. 60). Si bien no todos los trabajadores, al menos los dirigentes sindicales lo saben o deberían saberlo, como mínimo, pero aun así, aportaron lo suyo, mediáticamente, reuniéndose con el diputado Osvaldo Andrade, presidente de la Cámara Baja, en la sucursal capitalina del Congreso.
El martes 22 de noviembre se realizó una multitudinaria marcha por el centro de Santiago: desde Ahumada, por Huérfanos, hasta Manuel Rodríguez con Rosas, en donde está el edificio del Holding Falabella. Cerca de cinco mil trabajadores, encabezados por sus líderes sindicales y ni más ni menos que por los compañeros dirigentes de la CUT: Bárbara Figueroa y Arturo Martínez y otros, hasta el presidente de la Confusam Dr. Esteban Maturana, activísima participación política destacada en la página web de la multigremial. ¡Estaban en su salsa!, como lo estuvieron durante las movilizaciones de los trabajadores fiscales por el reajuste 2016-2017. Hoy, callan, y los mandamases del sindicato de Homecenter-Sodimac "este-yo-si-clarean" mirando a "los delegados de".
"Libertad y su eterna vigilancia"
Por el momento, para todos aquellos que creemos en la libertad, la única defensa es la vigilancia. Probablemente los populistas de un color u otro, más que resolver los problemas terminen aumentándolos en su ansia por concentrar y centralizar poder. Como indicaba Lord Acton, "el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente". Todo aquel que desee concentrar poder representa una amenaza. Por ello, es necesario seguir en la batalla de las ideas denunciando a todos aquellos que de un modo u otro desafíen la libertad individual. Como señalaba Thomas Jefferson, "el precio de la libertad es la eterna vigilancia". Hoy como liberales, más que nunca nos toca vigilar.
Jorge Saavedra Moena
Eduardo Fernández Luiña
Instituto Juan de Mariana