Josefa Herrera Zuleta
Una de las más antiguas celebraciones de verano comenzó la noche del viernes y continuó ayer con una divertida fiesta infantil que incluyó comida, helados, juegos, y animación para los más pequeños.
Y es que el carnaval de Cavancha se niega a morir a pesar de los cambios que ha experimentado el sector durante los años.
Según relata Antonio Yovich, parte del comité organizador de este año, el carnaval surgió como uno más de los tantos que había en el Iquique de antaño, y por la necesidad de los vecinos de despedir el verano de una forma diferente y entretenida.
-¿Cómo nació el Carnaval de Cavancha?
-"Con el asunto de la challa. Todos empezaron a jugar con ella y se dio la idea de empezar a hacer actividades para cerrar el verano. Por eso mismo, siempre los carnavales son en febrero".
DEL MUELLE A LA vILLA
En la Península de Cavancha el carnaval empezó en los años 60, y en la década del 70 se trasladaron las celebraciones a la Villa Olímpica.
Actualmente, en el lugar se celebrarán varias de las actividades, pero también la sede social de la villa será el escenario de varios espectáculo. Por ejemplo, la Noche de Eva de hoy domingo, es una ocasión creada de manera especial para todas las mujeres.
Actividades
Durante el día martes 28 se prevé una velada artística desde las 21 horas, que contará con la presencia de diferentes artistas nacionales.
El deporte llegará el primer día de marzo con un campeonato de baby fútbol que se realizará desde las 20.30 horas, en la Villa Olímpica.
El carnaval se comenzará a despedir el día viernes 3 de marzo con la coronación de la reina y el rey bufo y una fiesta bailable que incluye una orquesta y banda de bronce. "No hay competencia entre las reinas, se escoge antes", señala Yovich. Luego, esa misma noche, será la velatón del rey momo.
Entierro de Carnaval
El rey momo se enterrará el sábado 4 en el muelle de Cavancha con una peregrinación que parte desde la Villa Olímpica. "Antes, los cavanchinos se reunían en la Península y ahí se realizaban los carnavales, eran todas las actividades en el muelle y por eso mismo nosotros seguimos quemando al momo en el muelle".
Yovich comenta que este carnaval reúne no solo a cavanchinos antiguos y a los nuevos vecinos, sino que también a ciento de personas desde Arica y Antofagasta.
Además, destaca una particularidad de la fiesta: "Es un carnaval donde hay harto respeto, puede venir mucha gente en familia al entierro, a todas las actividades, porque tratamos de que no hayan desmanes y que no pasen a llevar al público, para que todos participen".
Desde la organización también resaltan la buena voluntad de los vecinos nuevos que llegan al sector, ya que comentan que el día de la velatón la bulla puede durar hasta altas horas de la madrugada y que, a pesar de eso, todos entienden el significado del carnaval y respetan esta tradición, unas de las pocas que se conserva y aún se realizan en los barrios históricos de Iquique, como también ocurre en El Morro y El Colorado.