Advierten que vertedero privado sería obstáculo para cerrar El Boro
Está siendo evaluado el relleno sanitario que pone en aprietos a los gobiernos de Iquique y Alto Hospicio.
Otro dolor de cabeza les ha generado a los municipios de Iquique y Alto Hospicio la tramitación del relleno sanitario Santa Inés por parte de la empresa Cosemar, el que ya está en trámite en el Servicio de Evaluación Ambiental.
La iniciativa pone en aprietos a los dos gobiernos locales ya que los obliga a apurar el tranco en una propuesta propia para un relleno mancomunado que permita cerrar el vertedero El Boro. Pero ha sido complejo. El alcalde de Alto Hospicio, Patricio Ferreira, reconoció que la licitación para el estudio de un relleno sanitario en Pampa Perdiz se declaró desierta, pues las empresas interesadas no cumplían los requisitos.
"Ese terreno tenía objeciones de algunos servicios públicos, fallas geológicas activas (Servicio Nacional de Geología y Minería), cursos de agua (Dirección de Obras Hidráulicas), y por eso decidimos explorar otro punto para poder avanzar. Desafortunadamente el otro punto, al que llamamos Alto Pozo, también cayó en los mismos inconvenientes. Tenemos las mejores intenciones de avanzar, pero tememos ir a explorar otro terreno y demorarnos tres, cuatro meses en saber cómo está para mandar la documentación a los servicios públicos y que nos digan 'acá tampoco se puede'", explicó.
Ferreira dijo además que en comparación con Alto Pozo, y a pesar de las observaciones, Pampa Perdiz seguiría siendo el mejor lugar para emplazar el relleno. De hecho, el alcalde adelantó que "probablemente" se haga otra licitación para realizar el estudio de una iniciativa "sostenible social, medioambiental y económicamente".
Mayores COSTOS
Mauricio Soria, alcalde de Iquique, municipio que administra el vertedero El Boro en Alto Hospicio, el que afecta a sectores residenciales cercanos, manifestó su preocupación por el avance de la empresa privada en detrimento de ambos municipios.
El jefe municipal mostró inquietud, pues a su juicio, la apertura del vertedero particular les generará un conflicto para el trámite de un relleno sanitario mancomunado.
Según Soria, a la hora de solicitar a futuro la rentabilidad social para un vertedero compartido que permita cerrar el botadero de El Boro, el financiamiento podría quedar en entredicho, pues la autoridad central argumentaría que para ese momento ya habrá un vertedero privado en operaciones.
"Nos complican los montos asociados, serían más de 150 millones mensuales para el municipio de Iquique y alrededor de unos 60 para el municipio de Alto Hospicio. Al año es una cifra considerable. Estamos impulsando algo más moderno, llevar a nuestra ciudad la valorización energética, el paso siguiente a un relleno sanitario", explicó, pidiendo apoyo al gobierno regional en buscar el mejor terreno e invitando al municipio de Pozo Almonte.
De acuerdo a cifras entregadas por Diego López, encargado municipal de Medioambiente, Iquique emite 456 toneladas diarias de basura, solo a nivel domiciliario, sin considerar la zona franca, el puerto, ni Alto Hospicio, lo que sería mucho mayor a la capacidad que podría recibir Cosemar, un máximo de 350 toneladas, dijo.
Hoy, informó el municipio iquiqueño, se pagan 300 millones por transporte y disposición de basura, cifra que aumentaría en 162 millones si se deposita en el relleno privado que está en trámite. La intendenta Claudia Rojas ya se comprometió a cesar las operaciones del vertedero El Boro este año.