En Santiago, en el marco de Explora Conicyt, se comentó la importancia de los cinco profesores finalistas para ser nominados al Nobel de la Enseñaza - Global Teacher Prize-, donde uno de ellos es nada menos que el profesor de Colchane Mauricio González.
Creo que ser finalista ya es un gran logro y si fuera elegido realmente sería un éxito completo.
Conozco a Mauricio y se merece el reconocimiento por su labor abnegada con los niños de Isluga.
Considero, además, que sería un premio para todos los maestros que han desempeñado su misión en el altiplano chileno, desde Parinacota hasta Peine y Socaire.
Mauricio merece ser felicitado y destacado junto a otros profesores, desde los maestros normalistas hasta los pedagogos en educación básica, incluyendo de modo especial a quienes recibieron una formación intercultural y bilingüe, que llevaron la enseñanza de calidad a las escuelita rurales de nuestra región. También felicitar a la Universidad de Tarapacá que formó como profesor a Mauricio González.
Preocupación
El motivo de esta carta es para dar a conocer un hecho que afectó a mi madre y que hoy la tiene en el hospital de Iquique y que no me gustaría le pasara a alguien más.
El pasado 6 de septiembre fuimos a la oficina de Claro a realizar el cierre de un plan, pero a pesar de que mi madre, Gladys Chía Cáceres, tiene 84 años, debió esperar una hora 40 minutos para que la atendieran. Pese a que traté de hacer las gestiones para que se le habilitara una atención preferente, no hubo disposición ni de los empleados ni la jefaturas a los que acudí en más de una oportunidad.
Finalmente cuando llaman a mi madre, y ya cansada de esperar tanto tiempo, tropezó y cayó en las dependencias, donde recién hubo interés de parte de los funcionarios por acercase a ver qué pasaba. Fueron los clientes, que también esperaban en el lugar, los primeros en llamar una ambulancia y hasta ahora no hubo mayor preocupación por mi madre, quien está con una fractura en la cadera derecha y a la espera de que llegue una pieza desde Estados Unidos para operarla.
Mi intensión con esta carta es solo que esta empresa ajuste sus procedimientos, ya que es habitual sus problemas de atención al cliente.
Mónica Calderón Chía
Sergio González Miranda