Larga espera de un histórico recinto
La noche del 26 de febrero de 2015 quedó en la historia negra de Tarapacá. Ello porque ese día comenzó a arder la Ex Aduana de Iquique. En aquella ocasión y luego de un arduo trabajo de Bomberos, el fuego no logró arrebatarle por completo a la capital regional una de sus más históricas joyas arquitectónicas.
Llegaron variadas autoridades, las que presenciaban con pena como el incendio consumía el recinto. De aquel lamentable suceso quedó una sola promesa, donde todos los presentes, sin color político, se juramentaban a que el recinto recobraría lo más pronto posible su esplendor, mediante la concreción de su restauración.
Casi tres años han pasado ya y hasta el momento, la estructura solo recibió un apuntalamiento desarrollado el año 2015 por el MOP. Por ello causó preocupación el anuncio realizado por el director regional de Arquitectura, Vladimir Urias, quien detalló que el estudio de diseño y diagnóstico para la restauración, costaría 300 millones de pesos, y que demoraría "por lo menos 18 meses".
Situación preocupante porque a este anuncio se le debe sumar todo el proceso de licitación y trámites administrativos que, según han dejado de manifiesto otros proyectos de restauración emblemáticos como el Teatro Municipal, pueden alargarse por muchos años.
Sin ir más lejos, tomando el caso del Teatro Municipal, el próximo 31 de mayo, cumplirá 11 años desde que se decretó su cierre parcial por parte del municipio, sin que hasta la fecha sea restaurado.
Los fantasmas de que haya un devenir similar para la Ex Aduana tienen fundamento, pensando en que, por ejemplo, aún no tiene financiamiento para el estudio de diseño, documento que permitiría saber, en concreto, el valor que tendría la restauración del recinto, lo que también habría que financiar. Se suma a ello obligatorios trámites de Contraloría, licitaciones públicas y otros procesos que son necesarios para resguardar los recursos públicos, pero cuya gestión toma tiempo.
Pase lo que pase, no hay que olvidar que la Ex Aduana está en el corazón de los iquiqueños y la comunidad añora ver el histórico recinto donde estuvo Arturo Prat restaurado.
"Los fantasmas de que haya un devenir similar para la Ex Aduana, tienen fundamento".