Leonardo Naveas Nuñez
A centímetros de electrocutarse quedó un parapentistas que tras un mal vuelo quedó colgado del tendido eléctrico.
El incidente ocurrió cerca de las 13 horas de este viernes, cuando un deportista argentino tras perder altura en su vuelo desde Alto Hospicio a Iquique, intentó aterrizar en las canchas del Cerro Dragón.
El problema se generó luego que al no controlar el parapente, se enredó en los cables de la red de mediana tensión y quedó colgando desde cerca de 10 metros de altura.
Hasta el lugar concurrió personal del Cuerpo de Bomberos de Iquique, de las compañías Iquique N°12 y Guardiamarina Ernesto Riquelme N°14 quienes trabajaron para rescatar al afectado, con ayuda de una escala telescópica.
Así lo confirmó el comandante del Cuerpo de Bomberos, Jorge Medina, quien manifestó que fueron solicitados por vecinos del sector que se percataron del incidente.
El oficial de Bomberos indicó que el parapentista quedó suspendido en el aire en los cables de mediana tensión. "Por algún motivo mientras volaba, tuvo una situación que lo llevó a quedar colgado de los cables".
Los voluntarios con la ayuda de una unidad mecánica, lo mantuvieron en el lugar con el fin de que no cayera desde los casi 10 metros de altura, desde donde quedó suspendido.
Al lugar concurrió también personal de la empresa eléctrica Eliqsa, quienes suspendieron el servicio para permitir el trabajo de Bomberos, con el fin de evitar que el afectado o alguno de los voluntarios sufriera una descarga. Tras ello lograron liberar al afectado.
Según declaró el comandante Medina, tras el rescate, el parapentista fue evaluado por paramédicos del Cuerpo de Bomberos y se encontraba en excelentes condiciones, agradeciendo el actuar del equipo de rescate y de los vecinos del sector quienes rápidamente se acercaron para auxiliarlo, dando aviso a las autoridades.
Antecedentes
Según declaró el deportista argentino a Carabineros de Primera Comisaría, salió desde Alto Hospicio en dirección a Iquique, donde realizó diversas maniobras, pero al llegar al sector del Cerro Dragón comenzó a perder altura, intentando descender en la planicie poniente de la duna, específicamente en las canchas de fútbol.
Sin embargo, al descender se encontró con "una bolsa de aire" que lo elevo nuevamente lo que le impidió hacer un aterrizaje limpio y se encontró inmediatamente después en la zona poblada, enredándose con los cables.
10 metros de altura, fue la distancia aproximada que separaba al parapentista argentino del suelo cuando quedó colgado.