Leonardo Naveas Nuñez
En prisión preventiva quedó una pareja imputada de causar lesiones graves a su pequeño hijo de dos años, hecho que fue descubierto luego que el llanto del menor alertara a sus vecinos, quienes lo encontraron amordazado al interior de una habitación.
El hecho quedó al descubierto cerca de las 21 horas del martes, en un cité ubicado en calle Las Magnolias de Alto Hospicio, donde una vecina escuchó al menor llorar.
La mujer concurrió hasta la habitación donde tocó sin tener respuesta, pero el niño continuaba llorando, por lo que junto a otro vecino decidieron forzar la puerta para verificar su estado.
Al ingresar al lugar, los residentes se encontraron con una terrible imagen. El niño permanecía sobre un colchón en el suelo e inmovilizado, debido a que estaba envuelto con una sábana que lo cubría desde los pies hasta la boca. Además, estaba amarrado con dos cinturones, uno de ellos a la altura de sus brazos y otro en sus tobillos.
Rápidamente los testigos se acercaron para liberar al niño, momento en que se percataron que tenía múltiples lesiones en diversas partes de su cuerpo.
Carabineros de la Tercera Comisaría de Alto Hospicio concurrieron tras ser alertados por la dueña del cité.
Tras revisar al niño, lo trasladaron hasta el hospital básico, donde se verificó que mantenía heridas de distinta data, por lo que el Ministerio Público argumentó durante la audiencia que las agresiones eran constantes. Además, la víctima presentaba una fractura nasal de carácter grave, pero sin riesgo vital.
Horas más tarde, los padres de la víctima, ambos bolivianos, concurrieron hasta el centro asistencial, donde fueron detenidos por Carabineros bajo los cargos de lesiones graves en contexto de violencia intrafamiliar y abandono.
Los hechos fueron informados al Juzgado de Familia, donde se dispuso que el menor fuera entregado a una tía.
Audiencia
El Ministerio Público instruyó los detenidos identificado como J.C.R. (23) y su mujer A.F.S. (24), fueran puestos a disposición del Juzgado de Garantía de Iquique, donde la fiscal Virginia Aravena los formalizó por los hechos antes descritos y solicitó la prisión preventiva.
Durante la audiencia, la persecutora penal manifestó que el tío de la víctima, testificó que su cuñado no tenía "paciencia con el niño" y que en las noches, para evitar su llanto, lo metía bajo la ducha con agua fría. Agregó que el familiar informó que durante dos semanas no lo pudo ver y que siempre decían que estaba durmiendo.
Aravena también manifestó que, según el testimonio del padre, éste habría reconocido que golpeaba al niño porque lloraba. Asimismo, al ser consultados por qué el menor estaba abandonado, explicaron que lo dejaron solo y amarrado porque debían salir a realizar trámites migratorios.
La magistrada Maritza Campos, tras oír los antecedentes resolvió decretar la prisión preventiva, pese a que el argumento de la defensa era que los progenitores no presentaban un peligro para la sociedad.
Para la investigación sefijaron 80 días de plazo, indicando que los imputados arriesgan 3 años y un día de cárcel por cada delito y con las agravantespodrían llegar a 5 años y 1 día.
80 días, fue el plazo de investigación fijado por el Juzgado de Garantía de Alto Hospcio.