EDITORIAL
Consumo de alcohol
De acuerdo a los datos del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), uno de cada dos adultos reconoce haber consumido alcohol alguna vez durante el último mes, mientras que el 80% de los mayores de 12 años afirma haber consumido al menos alguna vez en su vida.
Las cifran indican, además, que el consumo se concentra en 1,6 días a la semana y que los jóvenes, entre 15 y 24 años, beben en promedio ocho tragos cada día de consumo.
Se trata de un tema complejo, sobre todo si se considera que esta práctica conlleva serios riesgos para la salud. En efecto y según las estadísticas del Ministerio de Salud, se estima que una de cada 10 muertes en Chile se atribuye a la ingesta de esta sustancia.
En ese contexto, es importante valorar el convenio que hace pocos días firmaron la oficina Senda Tarapacá y la Municipalidad de Iquique para implementar el "Programa Comunal de Prevención del Consumo de Alcohol de Riesgo", iniciativa que busca -entre otros aspectos- normar, definir y revisar la política comunal respecto al expendio de bebidas alcohólicas, sus horarios, la aprobación de patentes y todo lo que permita reducir los factores de riesgos que involucra el consumo indiscriminado de esta droga lícita.
Pese a las numerosas campañas preventivas, la situación sigue siendo inquietante y el país aún se mantiene como uno de los que registra el mayor consumo a nivel continental. La realidad de la región no es menos preocupante y debe ser abordada de forma seria por sus autoridades.
Estos convenios pueden convertirse en una buena herramienta para combatir el problema. No obstante, se requieren acciones que permitan un análisis profundo y sincero sobre temas tan sensibles como el número de patentes para el expendio de alcohol que hoy tiene la comuna, los sectores donde se instalan este tipo de negocios y cómo cumplen con las normativas legales vigentes.
Es evidente que deben existir acuerdos transversales, pero especialmente voluntad para que prime el bien común sobre cualquier argumento económico.
"Se estima que una de cada 10 muertes en Chile se atribuye a la ingesta de esta sustancia".