Productos agrícolas
Una verdadera guerra es la que debe dar el Servicio Agrícola Ganadero, SAG, contra los contrabandistas de productos agropecuarios en la región.
La actividad se ha transformado en un negocio muy lucrativo para los que la ejercen, quienes amparados en la gran frontera que Tarapacá tiene con Bolivia, cruzan sin problemas con todo tipo de frutas, verduras y hasta huevos que no cumplen con las exigencias de fitosanitarias que impone nuestro país a los productores.
Asimismo, estos productos no cuentan con el estado de refrigeración para su traslado, lo que hace que muchas veces lleguen en muy malas condiciones a los consumidores.
Esto se ha transformado no solo en una competencia desleal para quienes se dedican con grandes esfuerzos a la agricultura en el norte de nuestro país, sino también que implica que se transmitan plagas como lo es la mosca de la fruta.
El SAG esta semana dio a conocer que tras siete meses de trabajo se logró eliminar todos los atisbos de esa especie en Iquique, luego que el año pasado se generara una alerta por el insecto en la región, lo que impidió que los productos de Pica pudieran venderse fuera del límite regional.
Sin duda, se trata de una buena noticia, sin embargo, esto llama a redoblar los esfuerzos fiscalizadores y a que el gobierno inyecte más recursos para que se pueda hacer un control más efectivo en todo el territorio regional.
Este año ya se han incautado más de 34 toneladas de productos que atentan contra el patrimonio fito y zoosanitario del país, ya que Chile se encuentra hace muchos años libre de la mosca de la fruta, lo que le entrega un prestigio a nivel internacional respecto a su producción.
Por otra parte, es importante que los consumidores no compren estos alimentos y se enteren del origen de lo que están adquiriendo, ya que los contrabandistas pagan precios hasta 10 veces más bajos del valor que ofrecen en las ferias locales.
Por último, es importante trabajar en una normativa más dura contra quienes se dedican a este negocio ilícito, sobre todo con multas más grandes que puedan afectar el patrimonio de quienes lucran con esta actividad ilícita y peligrosa.
"Este año ya se han incautado más de 34 toneladas de productos que atentan contra el patrimonio fito y zoosanitario del país".