La falta de capacidad en los cementerios 1 y 3 de Iquique, que datan de 1850 y 1908, respectivamente, es una señal de que urge la inauguración de otro o la ampliación de los dos ya existentes, no solo para quienes viven en esta comuna, sino también para las personas de Alto Hospicio, que todavía esperan un camposanto para enterrar a sus familiares cerca de ellos y visitarlos más seguido.
El cementerio más antiguo de Iquique, ubicado en la calle San Martín, ya está copado, con espacios solo en mausoleos de colonias extranjeras. El de la avenida Salvador Allende está a un 90% de su capacidad.
La concesión de terrenos en Los Verdes, aprobada por la Seremi de Bienes Nacionales, para que el municipio de Iquique realice los estudios necesarios para la elaboración del proyecto, es un paso importante de un largo camino que se deberá recorrer con el fin de concretar la obra. Ya se ordenó, según el gobierno comunal, un estudio de impacto ambiental.
Es un proyecto de largo aliento y complejo porque su concreción, y bien lo saben las autoridades, no es de un día para otro ni de meses de ejecución. Solo los estudios pueden tardar un año.
Además, para que no se realicen trabajos que no sean de utilidad, el proyecto debe ir de la mano con el Plan Regulador Intercomunal (PRI).
Por lo que las autoridades deben esperar el funcionamiento del PRI y sus lineamientos, para que el sector donde se espera construir el nuevo camposanto, coincida con los usos que pueden realizarse en dichos suelos. Las buenas decisiones, sin apuro y coordinadas entre todas las instituciones competentes, generarán un mejor futuro para esta iniciativa.
También esta necesidad no puede tener los mismos problemas que otros proyectos emblemáticos, como los de viviendas, en que la contrariedad entre las autoridades regionales ha destacado más que las propias soluciones unificadas para ayudar a los más vulnerables. Los gobiernos deben dejar de lado sus diferencias py generar las instancias de apoyo necesarias para que Iquique cuente con un camposanto acorde a las necesidades de la ciudad que queremos a largo plazo.
"Buenas decisiones, sin apuro y coordinadas entre las instituciones, generarán un mejor futuro para esta iniciativa".