La memoria de una sociedad es un constructo social que tiene que ver con el discurso dominante, el cual, es uno de los elementos que la teoría de Gramsci más resalta en su denominada batalla cultural.
Sin embargo el establecer una "memoria" no es necesariamente la generación de paz, menos de justicia, dado que es la imposición que nos impide desmarcarnos de una "historia oficial".
Por lo cual, a los defensores de la "memoria", deben tener en cuenta que esto no es Historia, dado que es una imposición de una versión o segmento de una realidad ante otra, por lo cual, simplemente no es Historia sino un relato o constructo social en beneficio de quienes ostentan el poder en esta batalla cultural, que en palabras de Hayek denominó "batalla de las ideas".
El ayer y el hoy
Dicen que todo tiempo pasado fue mejor, pero si comparamos el mundo de ayer y no tan lejano con el actual, presentan cada uno con claridad sus atributos y diferencias que entre otras y comparados serían como el mundo de ayer vs. hoy, individual vs. colectivo, simple vs. complejo, escaso vs. abundante, lejano vs. cercano, seguro vs. inseguro, activo vs. indolente, respetuoso vs. irrespetuoso, sensible vs. indiferente, reservado vs. comunicado, idealista vs. práctico, sensato vs. alienado, profundo vs. superficial, responsable vs. irresponsable, espiritual vs. material, con menos violencia vs. con más violencia, con excelencia vs. con mediocridad, con tiempo vs. sin tiempo, con límites vs. sin límites, con menos tecnología vs. con más tecnología, menos contaminado vs. más contaminado, menos poblado vs. más poblado, etcétera.
Cada cual juzgará de acuerdo a su criterio que mundo más cercano a su ideal prefiere.
José Caerols Silva
Natalia Véliz,
antropóloga social