Karina Sánchez
Luego de casi dos meses de ocurrido un accidente en la piscina del centro recreacional Jatata que causó la muerte de un niño de 11 años, su madre decidió publicar en varios grupos de Facebook su versión de los hechos y hacer un llamado a los padres para que verifiquen las medidas de seguridad de los recintos antes de llevar a sus hijos a estos, ahora que se acercan los paseos de fin de año.
"Hace algunos días leo el diario y veo que muchas de las piscinas tienen falencias. Nunca se me pasó por mi mente (que ocurría el accidente). Solo pensé que mi hija nada súper bien y mi hijo era un pez en el agua, practicaba bodyboard, nadaba y surfeaba con las olas, y una piscina de un 1,10 mt. le quita la vida en solo unos minutos", dijo Pamela Cerda, madre del niño.
Relató que el día del accidente la piscina estaba llena. "Eran tres las bombas que estaban sin su protección, que nunca deberían haber funcionado con niños, ni nadie en ella. Ahora me pregunto, tantas veces los llevé a una piscina y nunca pensé en ese peligro que hoy me devasta la vida".
Ante lo vivido, la mujer advirtió a los padres y apoderados para que en los paseos de fin de año se aseguren de "que todo esté en regla, porque tuvo que fallecer mi hijo para que Seremi de Salud supervisara las piscinas, no tenían salvavidas cuando yo gritaba y pedíamos el equipo de energía, no había ni siquiera oxígeno".
Fiscalizaciones
El seremi de Salud, Manuel Fernández, informó que las fiscalizaciones realizadas a las piscinas de la región, tanto en centros recreacionales como en hoteles, continuaron la última semana.
De acuerdo al reporte entregado por la institución, hasta el 28 de septiembre, nueve piscinas continuaban con suspensión de funcionamiento, siendo estas: Ancestrales, El Asador, Jatata, Bahía Verde, Tamarugal, El Refugio, Terrado Prat, Divasto, y Arenas Blancas. Además, se dio a conocer que tres no tienen autorización para funcionar, dos lograron abrir nuevamente al público y otras dos solicitaron el levantamiento de la suspensión.
"Hay muchos aspectos que pueden incidir en la seguridad de los usuarios, desde el material de las franjas reservadas para la circulación de bañistas, barandas o pasamanos, personal entrenado para la vigilancia y salvamento, hasta la calidad del agua, elementos que apuntan a resguardad la seguridad y salud de las personas", comentó el titular de la cartera.
Recomendaciones
El docente del Instituto Profesional Santo Tomás y prevencionista de riesgo, Ronald Rivera, explicó que existe una legislación que aprueba el reglamento para piscinas de uso público (Decreto 209 del año 2002) el cual en sus artículos 49 al 69 habla sobre los requisitos mínimos para funcionar.
No obstante, el especialista realizó una serie de recomendaciones para evitar accidentes como vigilar permanentemente a los niños cuando se estén bañando en la piscina o jugando cerca de esta, enseñar a los menores a nadar y a flotar, además de colocarles chalecos salvavidas según edad y peso.
Rivera afirmó que hay que evitar la práctica de "piqueros" y "bombitas" ya que constituyen un peligro de sufrir accidentes, tanto para quienes participan de estos juegos (pueden sufrir golpes en el fondo de la piscina y tener un daño cervical) como para aquellos que nadan tranquilamente en la piscina (pueden caer encima de ellos).
Finalmente, llamó a no acercarse a los ductos de desagüe y evitar correr por los bordes de la piscina, que suelen están mojados y pueden ocasionar caídas.