El Consejo de Competencias Mineras (CCM) es un organismo del Consejo Minero y fue creado en 2012 con el fin de proveer información que permita adecuar la oferta de formación de técnicos y profesionales a la demanda del mercado laboral minero. Esta entidad elabora estudios para proyectar cuántos trabajadores requerirá la industria minera en el futuro, de acuerdo a los proyectos de inversión.
Según este organismo, Tarapacá es la región que tendrá la más exigente demanda por trabajadores en el corto plazo, requiriendo más de 14.000 de aquí al 2019. Esta cifra es sorprendente, pero a la vez alarmante, ya que si bien es una buena noticia, surge la interrogante de si existe dicha cantidad de capital humano en nuestra región, y si éstos tendrían las capacidades técnicas o profesionales exigidas.
Según el mismo organismo, los perfiles más requeridos estarán asociados al desarrollo de los proyectos, tales como el caso de QB2 en Tarapacá. La demanda por trabajadores ya empezó pero… ¿Qué tipo de puestos son? Los perfiles requeridos, principalmente, son de los de ayudantes, maestros -en distintos niveles-, jornales, eléctricos, enfierradores, mecánicos, carpinteros, soldadores, concreteros y otros instrumentistas. Como podemos ver, son una serie de oficios de rápida capacitación, por lo que no es descabellado pensar que perfectamente estos puestos de trabajo disponibles pueden ser absorbidos por personas de la región, siendo ocupados tanto por las mismas mineras, o bien por contratistas y proveedores regionales, que esperamos que también sean estos últimos quienes se adjudiquen las licitaciones y terminen ejecutando los proyectos.
Sin duda, llegarán muchas almas esperanzadas en conseguir puestos de trabajo a la región, la misma que, paradójicamente, muestra los más altos índices de desempleo a nivel nacional. Es muy importante que se priorice la mano de obra local.
El otro gran desafío que surgirá posteriormente, es qué hacer luego de que los proyectos queden instalados. ¿Qué sucederá con toda esa mano de obra que ya cumplió su misión? Está claro que toda no podrá ser absorbida por la minería, y el peligro es que, al igual que una dieta alimenticia, el efecto rebote sea aún peor. El futuro puede ser muy bueno, si lo anticipamos inteligentemente. Debemos prepararnos, pero no en el corto plazo, sino pensar a 20 años, a lo menos.
"El futuro puede ser muy bueno, si lo anticipamos inteligentemente".
Leopoldo Bailac,, presidente Asociación de Industriales de Iquique"