EDITORIAL
Apoyar el emprendimiento
Un estudio realizado el año 2017 por el Ministerio de Economía y el Instituto Nacional de Estadística reveló que en Chile existen más de 1 millón 900 mil microemprendedores.
La encuesta, que se realiza de forma bianual y que se aplica desde 2013 en el país, busca entre otros datos, conocer las características de los microemprendimientos y de esa forma determinar qué factores les favorecen y perjudican. Para no generar distorsiones, la herramienta los define como aquellos negocios que, incluidos a sus dueños, cuentan con hasta 10 trabajadores.
Sin duda que iniciar un emprendimiento requiere valentía, mucho trabajo y gestión. Sin embargo, pese a todos esos factores, una herramienta clave para desarrollar proyectos es el impulso que tanto el mundo público como el privado entregan a las nuevas iniciativas. Esto significa no tan solo generar instancias que promuevan la creación de empresas, sino que también exista un acompañamiento en las distintas etapas de su desarrollo.
En ese contexto y pese a ser un tema que ha estado en la agenda pública hace ya bastante tiempo, la encuesta reveló que solo el 20,5% de los microemprendedores ha recibido algún tipo de capacitación durante los últimos cinco años. Una cifra menor si se considera que buena parte de la economía del país se sustenta en este tipo de actividades.
Desde el Estado se promueven instancias como Corfo, Sercotec y Fosis para asesorar a los emprendedores, mientras que desde el mundo privado son varias las organizaciones no gubernamentales, universidades y algunas empresas las que colaboran con espacios para que este tipo de iniciativas lleguen a buen puerto. Incluso existen varias experiencias que se basan en la asociatividad de estas instituciones.
El emprendimiento no solo permite materializar sueños e ideas. Además promueve la movilidad social y el crecimiento de las comunidades. En ese sentido, es indispensable que las políticas públicas pavimenten el camino a las buenas ideas y fomenten que cada día se sumen más personas a esta actividad.
Tarapacá tiene un gran potencial y eso no se debe desaprovechar.
"El 20,5% de los microemprendedores ha recibido algún tipo de capacitación durante los últimos cinco años".