La reforma al sistema previsional y sabiendo que ningún gobierno lo cambiará, me impresionó igualmente el que no se toquen para nada a las AFPs y todo se reduzca a darles más plata aún, aumentando las cotizaciones, incentivando a las personas de la tercera edad para que sigan trabajando, así a lo mejor se mueren antes de jubilarse y aumentando los recursos que el Estado le traspasa a las AFP.
Y no se habló para nada de las fabulosas ganancias que obtienen sus dueños, no se dijo nada acerca de la irracionalidad de cobrar comisiones cuando los hipotéticos dueños del dinero pierden sus recursos por el "comportamiento" de la economía mundial o las malas inversiones que ellos realizan o cuando le calculan la jubilación hasta los 110 años.
El sistema se basa en la mentira y el engaño, diciendo que las pensiones son miserables por los bajos salarios o las lagunas previsionales, lo que es falso. Una directora de escuela sin lagunas y con un sueldo de 1 millón recibe una pensión de $200.000. Y el promedio de los jubilados no supera el monto de los $145.000.
No se habló acerca del negociado de las comisiones y es bueno saber que por cada $100 que administra la AFP le cobra al afiliado 54 centavos y solo gasta 24 es decir el trabajador paga un 155 % por sobre lo que cuesta la administración de sus recursos. Pero eso no es todo, están las comisiones fantasmas que se pagan por las operaciones en el exterior y que los afiliados pagan con cargo a su fondo de pensiones y como el 40% de los activos administrados por las AFP están en el extranjero, los afiliados subsidian la rentabilidad de las AFPs que se ahorran este gasto.
Por otra parte, es bueno saber que las AFP recibieron en los últimos 25 años 90 "billones" (1 billón equivale a un millón de millones o sea 1.000.000.000.000) y solo pagaron en pensiones 30 billones. Para que estas sumas se puedan dimensionar digamos que en un mes las AFP reciben 500.000 millones y solo pagan en pensiones 200.000 millones ( el promedio de las pensiones es menos que el sueldo mínimo).
El resto se invierte en las empresas de los súper ricos : el retail, los bancos y otras multinacionales y así los recursos de los trabajadores ayudan a hacer más ricos al 1% de los chilenos que son los mismos que les prestan esos recursos con grandes intereses como préstamos de consumo o hipotecarios.
Otra buena tajada de estas platas se las llevan los directivos y ejecutivos de este negocio con sueldos e incentivos que un trabajador no alcanza a ganar en toda su vida.
Son el mejor negocio del mundo para los administradores y el peor para los verdaderos dueños del dinero: los trabajadores de Chile.
Es urgente buscar alternativas mas justas y solidarias.
Rosa Tassara