Es probable que en una década o un período de diez años, la mitad de la población mundial viva en zonas donde el agua no alcance para todos. Sin obviar a las personas que se mueren al año por falta de agua potable y que el requerimiento global de agua al año va en aumento de millones y millones de litros, y las fuentes naturales del precioso líquido ya no dan abasto.
Pero lamentablemente, la humanidad ha olvidado que no solo la necesita para tomar, sino que también olvida que casi todo lo que hace involucra al agua de alguna manera e ignora cuán alto es el consumo individual; porque no piensa en lo que toma ni lo que gasta duchándose o lavando la ropa y mucho menos que se necesita para hacer la comida que comemos y hacer los productos que usamos y consumimos ni tampoco se pregunta ¿Cuánto gastamos con lo que hacemos y en producir lo que consumimos?
Ahora, teniendo presente que la escasez mundial de agua potable sigue amenazando por convertirse en un grave problema para todo el mundo y no hay una pronta o rápida solución; la posibilidad de que estallen guerras por agua dulce es alta.
Por ello, pienso que el Gobierno de turno debería promover un Proyecto de Carretera Hídrica, a objeto extraer agua del Río Bío Bío para trasladarla al norte del país; en tuberías de considerable diámetro que transportarían agua a las zonas más devastadas por la sequía; y así, fomentar el desarrollo de la agricultura y/o para almacenamiento futuro; ya que las industrias mineras se han quedado con el recurso. Sin perjuicio en el impacto ecológico o daño al ecosistema que significaría sacar agua del cauce del río. Pero hoy, mañana y pasado; esas aguas que desembocan en el mar - sin uso alguno - siguen y seguirán perdiéndose.
Vehículo mal estacionado
Un conductor dejó su vehículo mal estacionado en un pasaje donde hay una sola vía que circula de sur a norte en el pasaje dos con calle Dr. Amador Negme.
Todos los vehículos están estacionados a la derecha y el es el único que dejó su vehículo a su izquierda, para que nadie más pase, estuve alrededor de cinco minutos con la bocina y no salió nadie, al final retrocedí y me di la vuelta por la avenida Bilbao.
Roberto Cisternas Contreras
Jorge Sánchez