Arzobispo de Antofagasta llamó a compartir la fe con quienes no creen
Monseñor Ignacio Ducasse fue quien, por invitación de la Diócesis de Iquique, presidió la misa de fiesta.
Con fuegos artificiales y con el saludo del alba por parte de los bailes religiosos se recibió el 16 de julio en La Tirana. Los bombos, trompetas, platillos y demás instrumentos, se escucharon en el pueblo hasta el amanecer, para luego, guardar silencio mientras se esperaba la misa de fiesta en honor a la Virgen del Carmen.
Tras el tradicional descendimiento de la imagen de la "Chinita", a las 10.30 horas se dio inicio a la solemne eucaristía que este año fue presidida por el arzobispo de Antofagasta, Ignacio Ducasse, quien durante la homilía llamó a la comunidad a compartir la fe con quienes no creen.
"Hoy, acercándonos a este templo dedicado a Nuestra Señora del Carmen, que se prolonga en esta explanada, pidámosle que nos ayude no solamente a creer y tener una fe intimista para nosotros, sino que nos ayude a compartir la alegría de ser creyentes con aquellos que aún no creen, y llevar su palabra a todas las personas", expresó el sacerdote.
Si bien la explanada no estuvo repleta como en la víspera, las muestras de devoción a la "Chinita" se expresaron en cada uno de los rincones de esta. Hubo quienes oraban entre lágrimas, mientras otros llegaron con pañuelos que llevaban impresa la imagen de la Virgen para obsequiar a los peregrinos y así cumplir con sus mandas.
"Hace dos años que vengo con mi marido. Tengo diabetes 1, depresión y una enfermedad crónica del pulmón, le pido a la Virgen poder sanarme", dijo Angélica Martínez.
El intendente Miguel Ángel Quezada y el alcalde Richard Godoy interpretaron las palabras del obispo Ducasse como un llamado a que las autoridades de la región se unan en favor de los pobladores tarapaqueños. "Cuando no hay elecciones, tenemos que unirnos en torno a las soluciones de nuestra gente", expresó Quezada.