Vecinos debieron cambiar sus rutinas por enfrentamientos tras protestas
Los residentes de los sectores donde se generan hechos de violencia, no pueden salir de sus casas al caer la noche.
No salir de sus casas después de las 20 horas, mantener las ventanas cerradas de sus departamentos, usar mascarillas para disminuir las molestias generadas por las bombas lacrimógenas, son algunas de las acciones que han adoptado las personas que viven alrededor de los principales puntos de enfrentamientos entre manifestantes y carabineros.
Se trata de los vecinos de la esquinas de avenida Arturo Prat y calle Diego Portales, avenida Arturo Prat y Genaro Gallo y la intersección de avenida Héroes de La Concepción y pasaje Los Lirios, quienes desde hace un mes debieron modificar sus rutinas tras el inicio del movimiento social por distintas demandas sociales.
Según contó Emilio Benavides, residente del edificio Alto del Parque (ubicado en Av. Arturo Prat y Genaro Gallo), el pasado lunes debió esquivar las piedras y bombas lacrimógenas para llegar hasta su hogar.
"Ayer (lunes) llegué a eso de las 9 de la noche y estaban en pleno enfrentamiento y debía llegar a mi departamento porque mi perro estaba solo y tenía las ventanas abiertas. Cuando llegué el departamento estaba gaseado completo. Por eso ahora cuando salgo en la mañana dejo todo cerrado", dijo.
Además contó que generalmente los enfrentamientos comienzan pasada las 19 horas y su duración es relativa. "Lo mínimo que ha durado son 30 minutos, pero el lunes estuvieron hasta la 1 de la mañana, había una barricada y por una parte estaban los carabineros y por la otra los manifestantes".
En ese sentido confesó que está cansado de la situación que ocurre afuera del edificio donde vive. "Apoyo todo el movimiento y lo que piden, pero siento que a veces se pasan. Sé que si lo hacen de manera pacífica no los van a escuchar, pero por último cambien cada día de lugar, para poder descansar un día".
Asimismo, Hugo Rojas, vecino del edificio Arrecife (que está en frente de las letras de Cavancha), contó que "como los enfrentamientos son cuando termina la marcha pacífica, queda un grupo de 30 a 50 personas que comienzan con los disturbios y por eso que junto a mi padre nos resguardamos a eso de las 20 horas y ya no salimos hasta el otro día.
Por su parte, Manuel González, quien vive en el edificio Las Antillas (a un costado del cuartel de Granaderos) contó que las personas que viven en ese lugar deben llegar antes de las 8 de la tarde o después de las 9 de la noche "porque a esa hora está la marcha y no se puede pasar. Los otros que están más afectados son las mascotas, porque están asustadas con las bombas de estruendo que tiran".
Sin embargo, manifestó que "es una parte que hay que sufrir porque la gente que está protestando tiene razón, fuera de que uno esté en una mejor posición, siempre hay que acordarse que hay otras personas que lo están pasando mal".
En tanto, Hibert Colque, quien tiene un restorán en la avenida Héroes de la Concepción, comentó que "ha sido un mes complicado porque estamos en plena esquina, por eso que debemos usar mascarillas para no tener tanta picazón en la garganta y el ardor en los ojos".
Agregó que también debieron modificar su horario de atención al público. "Antes atendíamos hasta las 11, pero ahora a las 8 ya está cerrado".
3 puntos de la ciudad es donde se concentran principalmente los enfrentamientos tras las marchas.