l Alejandro Rondón O.

on una poco grata sorpresa se encontró una mujer iquiqueña, quien luego de abrir un paquete de Brownies (queque de chocolate), encontró cerca de diez corchetes en su interior, los que asegura que de no ser porque no consumía líquidos con ellos, se los habría tragado.

El caso afectó a Jessica Ruiz Spuler, embarazada de 31 semanas, quien relata que el pasado miércoles tuvo un "antojo", por lo que compró el producto junto a un yoghurt en el sector del consultorio Cirujano Guzmán, consumiéndolo sólo cinco horas después en su casa.

"En la tarde me dio hambre y lo abrí, no quise tomar líquido, estaba antojada y cuando comencé a masticar, sentí algo raro. Al revisarlo encontré los corchetes, no se si me tragué algunos o no, ya que por mi embarazo no me pueden sacar radiografías", señala la aún asustada mujer.

Jessica explicó que no sabía qué hacer, por lo que en primer lugar acudió al Servicio Nacional del Consumidor para que la orientaran, desde donde la derivaron a la seremi de Salud.

"En la seremi me tomaron la denuncia y dijeron que se investigaría lo que sucedió". Añadió que quiso hacer público el caso para que no le sucediera lo mismo a alguna otra persona o un niño, que sería peor.

Desde la seremi de Salud en tanto, confirmaron la denuncia realizada por la mujer, señalando que en estos casos, al ser un producto envasado, individualmente no sirve como prueba. El procedimiento indica que el personal de la seremi debe visitar el local en el que fue adquirido el producto, controlar sus condiciones sanitarias y posteriormente revisar la partida completa de dulces, informando de ello a los representantes de la marca en Santiago. J