Propietarios les pidieron abandonar sus casas quedando a la deriva con sus familias.
l Yocelyn Araneda Carrillo
Muchos de los damnificados con los terremotos del 1 y 2 de abril vivían de allegados o arrendaban quedando hoy en la calle al perder sus alternativas habitacionales.
Hoy su mayor angustia está relacionada con la incertidumbre ante un eventual desalojo en los campamentos donde viven, sin saber si podrán optar a algún beneficio.
"Con el primer terremoto se cayó el segundo piso, que era donde arrendábamos. No queremos volver y no sabemos nada respecto a los trámites que ha hecho el dueño de la propiedad. Ahora vivimos en este auto que amablemente nos prestó un vecino y gracias a la acogida de los damnificados de este campamento del cementerio", afirmó Héctor Reyes, quien junto a su pareja Carmen Pérez, aseguran que nadie los ha catastrarlos como afectados.
Una situación preocupante considerando que Reyes tuvo un accidente hace tres meses mientras trabajaba como albañil, lo que hoy lo limita a movilizarse con muletas y una fécula en su pie derecho.
Mariela Tabuada, florista y comerciante en el Cementerio 3 desde hace 10 años, también asegura ser damnificada. Relata que hace seis meses quedó viuda y que debió dejar la casa que arrendaba viviendo de allegada donde un cercano con sus dos hijos, nuera y dos nietos, lugar donde el techo se habría caído por el terremoto, por lo que hoy viven en su puesto de venta de flores.
"No puedo exigirle al dueño de la casa si nos acogió. Ahora acá no nos ha visitado ni una asistente social aunque no nos ha faltado gracias a Dios", comentó Tabuada, siempre con la inquietud respecto a su devenir complicado por su artrosis que la hace depender de muchos medicamentos.
Asimismo Patricia Gallardo afirma estar desesperada. Junto a sus seis hijos y su marido hoy viven en carpa en dependencias del Colegio Deportivo de Iquique, CODE, luego de pasar por los albergues dispuestos en el colegio Italia y el España. Ellos quedaron sin casa cuando la vivienda que arrendaban se dañara con los sismos, siendo solicitada por su dueño dejándolos en la calle.
"Me pasaron una vez un paquete de pañales de 28 unidades. No tengo leche y ahora vengo a pedir un colchón. No sabemos qué pasa con las mediaguas y más encima nos dijeron que el jueves hay que salir y no sabemos dónde ir", dijo, con la esperanza que la entrega de ayuda se ordene y salir ademásm de sus deudas. J
l Ximena Gallardo encargada (s) de la Dideco, aclaró que "oficialmente no hay información sobre el desalojo de los campamentos en el Cementerio 3, la Rotonda El Pampino o en el Centro Deportivo", aunque destacó el continuo trabajo municipal entregando ayuda. Recordemos que las autoridades cifran en cerca de 1.500 las viviendas inhabitables y en 8 mil las que tienen daños de diversa consideración.
En este contexto el seremi de Gobierno, Luigi Giocca, dijo que pueden consultar la condición de sus casas en el Serviu, apelando al registro recogido por los 3 equipos de trabajo que conformó la ministra de Vivienda Paulina Saball en la región distribuidos en la provincia de El Tamarugal, Alto Hospicio e Iquique. Además dijo que está en evaluación el terreno que se destinará para acoger a familias cuyas casas estén destruidas o inhabitables, siendo una de las posibilidades, la cancha de motocross ubicada en el Cerro Dragón.