Tomar justicia por sus propias manos parece ser la tónica de la ciudadanía durante estos últimos días.

Ejemplo de ello es el hecho ocurrido en el conjunto habitacional Los Alelíes el 8 de mayo pasado, donde dos delincuentes que ingresaron a robar, fueron detenidos por los vecinos del lugar.

Otro caso similar ocurrió el 14 del mismo mes, cuando transeúntes detuvieron a una persona de la tercera edad que había sustraido un celular desde una oficina bancaria.

A pesar que otros individuos quisieron evitarlo, la presión de los vecinos fue mayor y lo retuvieron hasta la llegada de Carabineros.

Uno de los últimos hechos sucedió el 1 de julio, donde tres individuos asaltaron a una transeúnte en 21 de Mayo con O'Higgins.

Gracias a la ayuda de un peatón que cruzó la vereda, se pudo detener a uno de ellos hasta que se constituyó Carabineros en el lugar, ante la mirada atónita del resto de las personas.

Entre los vecinos que observaron el robo estuvo Marcial Roque, quien apoyó estos hechos. 'Me parece bien que hagan justicia, ya que las leyes están mal. Carabineros hace bien su trabajo, pero fiscales y defensores dejan libres a los muñecos'.

Además añadió que, en el sector 'tenemos una especie de cadena comunicacional para llamar a Carabineros y que vengan al momento', sostuvo Roque.

En tanto, un vecino que no quiso revelar su identidad, señaló que 'acá las cosas son feas, por eso soy ciego, sordo y mudo', adujo.

El comandante de la Primera Comisaría de Iquique, Juan Carlos Huilcamán, señaló que este tipo de detenciones son frecuentes, pero recomienda no realizarlas, ya que si los delincuentes son agredidos, también puede ser detenido el vecino.

Sobre las causas que gatillan estas situaciones, el sociólogo Bernardo Guerrero indicó que se trata de un malestar frente a la seguridad ciudadana y no que las leyes sean 'blandas', como dice la gente. 'El tema se politizó desde Piñera con la puerta giratoria. Fue un desastre decir que iba a terminar con la delincuencia porque no pasó nada'. J