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'Joyas' juntan polvo en corral de Alto Hospicio

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En medio de un lote de chatarra que la tierra y el tiempo no discriminan, el corral municipal de Alto Hospicio custodia vehículos de un alto valor comercial que llevan años sin ser reclamados por sus dueños.

Son 2.781 máquinas las que completan el libro de registros de José Toro, administrador del sitio desde hace tres años. José, habló que desde que comenzó su experiencia de trabajo se dedicó a darle un orden y protocolo a la tarea.

Por eso, cada auto tiene asignado un código, el que también porta la respectiva llave. Las cámaras de seguridad que tiene instaladas el recinto contribuyen a que no se produzcan delitos en el interior.

'Nos preocupamos de que el auto se conserve tal cual como lo trajo la grúa el primer día', afirmó el responsable mientras mostraba la habitación donde se guardan llamativos accesorios de algunos carros, como parlantes subwoofer.

El espacio en la hectárea destinada al propósito cada vez es más escaso, por lo que los autos que ya llevan algunos meses sin noticias de sus dueños comienzan a construir verdaderas torres de hasta tres pisos.

Sin embargo, el mismo administrador describió que espera que prontamente se pueda inaugurar un nuevo corral donde reunir más automóviles.

'Se hace un listado con los posibles vehículos a rematar y se entrega al personal jurídico, que es quien decide el destino de este. El municipio tiene la responsabilidad frente al dueño de cuidar el vehículo mientras esté acá', explicó el encargado del sitio.

Según revela el minucioso registro que posee José, una cifra cercana al 90% llegó al corral debido a infracciones y accidentes de tránsito. Sin embargo, el 10% arribó al patio por que estuvo involucrado en delitos con drogas.

'Muchos dueños vienen a preguntar por su auto y yo les digo 'ahí arriba está' (apuntando a la chatarra apilada). Lo ven así y prefieren dejarlo aquí y darlo por perdido', agregó José.

Las camionetas 4x4 también abundan. Lo más llamativo, es sin duda una Hummer 4x4, que cayó al corral en 2012 por infracción a la ley 20 mil de drogas. Un grupo de 40 jeeps que fueron robados en Chile y encontrados en Bolivia también resaltan entre los montones.

Continuando el recorrido por el polvoriento espacio, resalta un Kia modelo Rio 3, fabricado el año 2013 y en condición de cero kilómetro.

'Lleva más de un año acá y llegó porque mientras la concesionaria lo trasladaba para venderlo, fue encontrada droga en su interior', contó José Toro mientras exhibió el impecable estado interior que mantenía el automóvil.

Tiene un valor comercial cercano a los 7 millones de pesos, y en su versión full, puede llegar incluso hasta los 8 millones. Sin embargo, al igual que la Hummer, hoy la condición que tienen los aleja mucho del precio promedio que tendrían de estar en el mercado de autos usados.

El número de personas que acude a recuperar es siempre inferior al total de vehículos. Llegan cerca de 40 a la semana, y al mes, la tendencia da cuenta de no más de diez devoluciones.

'No había venido a buscarlo porque después del accidente me compré otro auto al tiro', relató Juan Flores, quien volcó en su camioneta en marzo pasado y fue el día de ayer a gestionar el retiro.

Pese a los visibles daños, el propietario confesó que espera recuperar algo dinero con algunas piezas.

'Quiero vender el motor, la caja y después comercializar los restos como chatarra', contó el dueño, quien encontró su deteriorada camioneta 'aparcada' sobre otro coche.

Los 5 meses tendrán un costo de cerca de 30 mil para Juan, ya que la tarifa mensual que cobra el aparcadero por cada mes es de aproximadamente 6 mil pesos.

Pero no son sólo autos los que llenan el patio, también hay motocicletas. La mayoría son del tipo scooter y rara vez son rescatadas por sus dueños, según contaron en el corral.

Una de las máquinas más insignes del fabricante Honda destaca entre las piezas abandonadas de dos ruedas.

'Es una moto muy vieja. Habría que meterle muchas lucas para dejarla funcionando y por los años que debe tener ya no vale la pena', explicó el corredor iquiqueño Rodrigo 'Yiyo' Illanes tras ver la motocicleta.

Haciendo caso a las quejas de la ciudadanía por la abundante presencia de autos abandonados en la vía pública, el concejo municipal de Alto Hospicio aprobó recientemente una ordenanza que agiliza el retiro de estos desde las calles, una medida que aumentará la cantidad de armatostes en el corral municipal.

Los objetivos son claros: evitar que las máquinas abandonadas en las calles se conviertan en puntos que acumulan basura y hasta sean utilizados en ciertas ocasiones como escondites por delincuentes.

'Hay gente que ha tomado las calles o pasajes para guardar los vehículos abandonado o con desperfectos, los cuales rápidamente se transforman en microbasurales, guaridas de delincuentes o drogadictos, viéndose los propios vecinos de esos barrios afectados', declaró el alcalde de la ciudad, Ramón Galleguillos.

La ordenanza será posible gracias a la puesta en funcionamiento de una nueva grúa que compró el municipio, la cual se sumará a la lista de móviles encargado de la tarea.

Por ahora, el corral municipal seguirá juntando una amplia gama de autos, que en su mayoría, dejaron de ser una preocupación para sus dueños y no tienen otro destino que llenarse de polvo para convertirse en chatarra. J