Protesta 'líquida' en Chache Shop
Los parroquianos del Chache Shop aseguran que no pararán de tomar hasta que les devuelvan la mítica mamadera con licor de cacao. Es un ícono del local y dicen que el shop es menos dulce desde el sábado.
Los parroquianos del Chache Shop aseguran que no pararán de tomar hasta que les devuelvan la mítica mamadera con licor de cacao. Es un ícono del local y dicen que el shop es menos dulce desde el sábado.
Pese a que aseguran que no le tienen miedo, desde temprano varios políticos llamaron para opinar sobre la candidatura de Ramón Galleguillos como alcalde de Iquique. Contradictorio.
En Iquique, en Santiago y ahora en el sur del Perú. Los temblores rondan en todo el cono sur de América y aunque son impredecibles, lo mejor es estar preparados. Lo bueno es que la ciudad aguantó bien uno 8.2 Richter y si hay otro fuerte lo esperaremos como se acostumbra en la Tierra de Campeones.
El terremoto reveló los problemas de conectividad vial que desde hace mucho tiempo afectan en Iquique, pero que lamentablemente siguen sin solución.
La conexión con Alto Hospicio es la principal, sin embargo, también al interior de la ciudad se evidencia este problema, muchas veces inexplicable para la baja demografía que presenta la capital regional.
Desde el 2005 el Ministerio de Transportes detectó el problema y se generaron algunos proyectos que en su mayor parte no han sido concretados. Es el caso de los pares viales de Juan Martínez - Arturo Fernández, O'Higgins - Bulnes y Sotomayor - Cirujano Videla, de los que solo se ha concluido el primero.
Si bien tras el diagnóstico esto sería clave para mejorar la conectividad al centro de Iquique, si no están los tres funcionando, está lejos de ser una solución.
Un hecho que ayuda al colapso vial son los más de 4 mil taxis básicos que circulan en la región, las estrechas calles herencia de la época salitrera y un parque vehicular de 76.226 con un automóvil por cada 2,41 personas.
Aunque en Iquique hay 183.997 habitantes, se suman los miles de hospicianos que cada día circulan por las calles del ex puerto salitrero, tanto por trabajo o por estudios, lo que implica una carga que cada vez es más difícil de soportar.
Un punto aparte es el estado de las calles, avenidas y semáforos desincronizados, que solo ayudan a relentizar aún más los flujos viales, junto a los más de mil vehículos que aún están en las calles abandonados.
El gobierno iniciará una serie de diálogos con el fin de mejorar la vida en la ciudad, sin embargo, se requieren medidas rápidas en un tema donde hay consenso respecto a la necesidad de mejorar la circulación.
Un proyecto innovador, aunque no tanto para los iquiqueños que por años escucharon de esta idea, es el teleférico, que pretende ser una solución para salvar con rapidez el acceso a Alto Hospicio.
La ciudadanía espera medidas concretas y que lleguen más rápido que lo que han demorado los pares viales y el nuevo acceso a Alto Hospicio. Prueba de ello es el estrés que han generado las demoras a causa de los arreglo en la ruta A-16, que se expresa todos los días en las redes sociales.
La ciudad crece a un ritmo que sobrepasa a las soluciones viales y si no existe un salto en infraestructura, Iquique no estará preparado para el desarrollo que se espera para los próximos años.