Los menores y directivos de la Asociación de Fútbol Infantil y Juvenil de Alto Hospicio (Afijah) siguen protestando porque aseguran que el municipio les quitó una de la canchas que utilizan en el sector La Quebradilla, para entregársela a los jugadores de la liga Canadela. Éstos últimos quedaron sin lugar para competir, tras entregar su recinto deportivo para la construcción de viviendas de emergencia para los afectados por los terremotos.
'Nosotros queremos aclarar que nuestra intención es que tanto los niños como los jugadores de nuestra liga tengan un lugar para jugar. No pretendemos que los menores queden sin cancha, por lo mismo buscamos una solución con el alcalde Ramón Galleguillos y el gobierno regional', dijo César Tapia, presidente de Canadela.
La solución dispuesta por las autoridades es que la liga de adultos y los niños y menores de Afijah utilicen una de las dos canchas del sector La Quebradilla.
'Además la minera Teck Quebrada Blanca se comprometió a mejorar la cancha que usaremos, colocando relleno de arcilla, medidas reglamentarias, cierre perimetral, camarines y baños. Después cuando nos vayamos, que será en tres años más, el recinto en buenas condiciones quedará para los menores', dijo Ricardo Llanes, miembro del directorio de la liga Canadela.
En dos a tres meses más estará disponible el reducto para los 800 jugadores que integran dos series en competición: senior y todo competidor desde los 18 años.
Mientras 18 de los 32 clubes en total arriendan una dependencia de la Liga Andina, ubicada en el sector La Negra. 'Buscamos una cancha que fuera cercana', dijo Llanes.
Por último el directivo añadió que 'La Quebradilla fue la última opción de las que teníamos. Eran prioridades unos espacios en El Boro o Autoconstrucción, pero están en muy malas condiciones'. J