Dicen que no hay consuelo tras la pérdida y que nada les devolverá no ver sonreír más a su querida Karla Covarrubias Mulati, joven que murió trágicamente en abril cuando el conductor que guiaba el auto en estado de ebriedad chocó a otro que estaba estacionado en el sector sur de Iquique.
Gabriel Rodríguez, tío de la joven, y Margarita Mulati, madre de la víctima, recuerdan a Karla como una joven deportista que tenía proyecciones en las competencias de que tanto le gustaban.
Ante la aprobación de la llamada Ley Emilia, que aumenta las sanciones contra los conductores ebrios que causen lesiones graves o la muerte, la familia de la joven que murió a la edad de 19 años lamentan que la legislación no sea retroactiva.
'Lamentablemente no es retroactiva la Ley Emilia, por eso me gustaría hacer un llamado a los políticos para que legislen bien, porque creo que se deben dar castigos ejemplares y no esperar que aparezcan casos nuevos para aplicarla. Se deberían buscar los casos en proceso para que estas personas paguen ahora', comentó Gabriel Rodríguez.
Agregó que el imputado como responsable de este caso podría salir en libertad. 'Que nos digan eso, no es un buen consuelo, porque consideramos que no se hizo todo lo posible para condenarlo. A la madre no la dejan conforme', afirmó Rodríguez.
La golpeada familia dijo también que lo único que quieren es justicia y que no son tocados por la Ley Emilia, que ayer fue publicada en el Diario Oficial. Además desean que el responsable cumpla una pena efectiva en la cárcel.
El diputado Hugo Gutiérrez, quien estuvo detrás de la redacción de la modificación de la ley de Tránsito, comentó que al ser promulgado el proyecto se le vino a la cabeza la imagen de los padres de la pequeña Emilia Silva, guagua de nueve meses que murió a causa de las lesiones ocasionadas por el choque al vehículo de sus padres efectuado por un hombre que huyó del lugar.
El parlamentario destacó que el nuevo marco legal busca aumentar la penalidad a quienes ocasionen daños a terceros al manejar en estado de ebriedad, aumentando la penalidad de 3 años y un día a 10 años de presidio. 'Esto se hizo para que los responsables no obtuvieran la libertad provisional', dijo Gutiérrez.
Además la ley busca perseguir que cualquiera haya sido el resultado de las lesiones, los responsables queden privados de libertad al menos un año.
Asimismo, fueron creadas tres causales que agravan la responsabilidad penal: que los responsables se den a la fuga dejando abandonada a la víctima, la reincidencia y que un chofer profesional maneje en estado de ebriedad y le quite la vida a alguien.
Gutiérrez aseveró también que muchas personas lo han contactado porque la ley no es retroactiva: 'Lamentablemente yo les he dicho a todos que como toda legislación penal no puede tener efecto retroactivo. Por ejemplo, se puede hacer un cálculo de qué hubiese pasado si el hijo de Carlos Larraín hubiese sido condenado por la Ley Emilia. Lo más probable es que hoy estaría preso y que por todas las agravantes el habría recibido una pena de 10 años'. J