Secciones

Pulpería tendrá iluminación y reforzamiento antisísmico

E-mail Compartir

Los trabajos en el lugar avanzan de manera acelerada y en siete meses serán entregados, adelantándose a lo presupuestado.

Reforzamientos del techo, restauración de puertas y ventanas, incrustaciones de telas de carbono y otros elementos que darán flexibilidad a su estructura, son algunos de los arreglos que se realizan en la pulpería de la ex oficina salitrera Santiago Humberstone, uno de los primeros pasos para convertirse en un centro de interpretación del salitre.

En un recorrido por las instalaciones, ya se aprecian los trabajos de limpieza de calaminas, reconstruyeron paredes y se dotó de iluminación diversos sectores, con el fin de resguardar el patrimonio arquitectónico del lugar, además de reforzar las estructuras, para que no sufran con los sismos.

Silvio Zerega, director ejecutivo de la Corporación Museo del Salitre, explicó que "estamos contentos con lo que ha sucedido, ya que la empresa a cargo (PSI) ha trabajado con mucha gente y eso significa que entregarán antes la obra, por lo que debemos trabajar antes en la museografía del lugar".

El encargado de la corporación recalcó que el trabajo realizado ha tenido una constante inspección, donde se han visto cuidados los detalles de su refacción y restauración, donde cada una de las piezas que fueron sacadas se fotografiaron y numeraron, con el fin de colocarlas en su sitio original.

Mientras que en los sectores donde se carecía de puertas o ventanas, se dejará el espacio libre, para no interrumpir el estado original en el que se encontró la estructura al momento de ser intervenida.

A la vez, se realizó el cambio de toda la techumbre, con el fin de evitar el deterioro del sol y desde la constructora indicaron que decidieron no poner una capa de calaminas oxidadas en la cubierta, debido a que el peso de ellas podría acarrear problemas a la pulpería.

FINANCIAMIENTO

La iniciativa busca evitar cualquiera modificación que signifique alterar el edificio, por lo que no serán intervenidos los frigoríficos ni se modificarán las huellas en el piso, por las filas que durante años hicieron las personas que compraban en el lugar. J