l Novak Djokovic tiene una doble tarea, tanto en el tenis como en su vida personal. "Ser padre es ser el número uno", expresó el tenista serbio, citado por EFE. Su esposa, Jelena Ristic, hace poco dio a luz a su primer hijo Stefan. "Ser padre fue lo más bonito que me ha pasado en mi vida (...) Pero no creo que afecte a mi carrera tenística", aseguró.

El actual número uno del ranking ATP no le pierde pista a los avances del suizo Roger Federer, quien ganó por sexta vez el torneo de Basilea y se acerca al Top One.

Sobre su rival, el serbio aseguró que "está jugando un gran tenis, quizá el mejor de su carrera. El año pasado no fue muy bueno para él, fue el peor de su carrera, tuvo alguna derrota inesperada, pero ha vuelto con una gran fuerza".

Además de los récords que ostenta el tenista helvético, está la final de la Copa Davis entre Suiza y Francia. "Está muy motivado para ser número uno y yo tengo muchos puntos que defender en este final de temporada. Pero el año pasado demostré que puedo jugar bien aquí y en Londres, así que voy a pelear", agregó.

A Djokovic le tocará defender su título en el Masters 1000 de París- Bercy y deberá mantenerse firme hasta el Masters final que se jugará en Londres. "Creo que peleará por ser el número uno. Los dos estamos jugando bien, será un bonito desafío", finalizó. J

Parece que Harold Mayne-Nicholls, sin aclararlo, ha comenzado extraoficialmente su campaña electoral. Ayer dispuso de un micrófono y atacó con rabia estratégica a Joseph Blatter. Dijo que Blatter es vanidoso ("Vuelve a presentarse -a la FIFA- y entonces uno duda de si quiere al fútbol o si se quiere a sí mismo"). Dijo que Blatter es un obstáculo en la FIFA. Que dice una cosa y, finalmente, seducido por el efecto del poder y otros secretos, hace otra. Y que le hace daño al fútbol ("Puede dañar los mundiales de forma irreversible"). Deslizó que Blatter es el enemigo y merece ser aniquilado por un ex subalterno. Por el nuevo mesías de la América futbolizada: ha irrumpido como nunca el postulante chileno al sillón.

-Chuta. Se fue con todo- dijo el líder sindical Carlos Soto.

-Se puede asumir.

Harold Mayne-Nicholls, 53 años, periodista minucioso, escaso de carisma, funcionario fundamental de la FIFA desde 1993, casado, seis hijos, apodado en la intimidad como "El Petrolero", amigo de Bielsa y enemigo de cualquier cantidad de dirigentes locales, no ha definido su candidatura. Pero da entrevistas con tono de candidato. De forma oficial está pensando su postulación; y de forma extraoficial ataca al rival.

No Harold

-Ni siquiera se sabe si Chile lo va a apoyar.

Opina que Blatter no es mala persona, sólo ha sido caricaturizado como un inmoral con cuenta bancaria. ¿Y es narciso el señor Blatter? "Mmm…es que, como sea, el fútbol sigue desarrollándose con él". A Harold, en cambio, lo define como "un prototipo FIFA, de cuaderno en mano, típico, pero sin camarín". Concluye: "A Harold le falta".

Sí Harold

-Bueno, si empezó la campaña hay que apoyarlo- opina Ricardo Abumohor, presidente del fútbol chileno entre los años 1993 y 1998.

-

-Porque es el hombre.

-Tres cosas: es eficiente, tiene experiencia y, ojo con esta, es TRANSPARENTE (grito). El fútbol necesita cambios en todos sus estamentos, amigo.

-¡Pues debería ser apoyado! ¡Cómo no se lo va a apoyar, si es chileno!

Otro que comunica su apoyo es Valentín Cartegnanni, ex presidente de Audax Italiano: "Que exprese sus ideas. Tiene todos los méritos para ser presidente de la FIFA, sería bueno para Chile". Y así está la comunidad deportiva: unos van por el NO y otros por el SÍ. Mayine-Nicholls informa que no lo ha decidido, pero da entrevistas internacionales. Y cierra sus palabras con un misterioso: "Si no hacemos algo, nos vamos a arrepentir toda la vida". J