El legado de los elegidos
Hace unos meses atrás recibimos la noticia de que uno de los nuestros había sido elegido Premio Nacional de Historia, alegró a los habitantes de la Región de Tarapacá, y la gran cobertura mediática local, nacional e internacional alcanzada por el renombrado investigador y académico Dr. Sergio González Miranda, sorprendió a muchos no acostumbrados a recibir tanta atención del centro del país, del extranjero y también de sus autoridades.
De esta manera su nombre se sumó a los de Mabel Condemarín, Lautaro Núñez y Oscar Hahn, otros iquiqueños que alcanzaron también el honor de ser premios nacionales. Pero, ¿Qué es lo que hoy implica ser uno de ellos?, ¿Cuáles son las atribuciones que una distinción como esta le confiere a este selecto grupo de elegidos?. Para muchos los elementos fundamentales que conlleva este merecimiento son la fama y el reconocimiento del mundo científico. No obstante, tal vez el más importante de ellos sea la responsabilidad que cae sobre los hombros de estos hombres y mujeres de ser artífices de un cambio que genere transformaciones dentro de su entorno mediato, haciendo accesible el saber y motivando a los jóvenes talentos, haciéndoles entender como ha mencionado ya innumerables veces el Dr. González que "Se puede hacer ciencia y generar conocimiento de calidad desde las regiones ".
Esta simple frase les ha abierto el mundo a cientos de estudiantes de enseñanza preescolar, básica y media en todo el país quienes han tenido el honor de contar con la presencia en charlas y conferencias de diversa complejidad y temáticas del profesor.
Es que para estos estudiosos el saber se comparte y adquiere un doble valor al entregarlos a otros que podrán enriquecerlo, y mientras algunos se preguntarán ¿Les habrá cambiado la vida al recibir tan merecido reconocimiento?, lo cierto es que en algunos años sus mayores logros estarán vivos en niños y jóvenes amantes de la ciencia a los que ayudó a entender, con sencillez y grandeza, que los sueños se pueden alcanzar.