En el marco de la inauguración del SIOP 2014, el Gobernador de Iquique Gonzalo Prieto calificó al Puerto como "es parte de nuestra identidad, de nuestros afectos, de gente que se ha criado en esta ciudad", agregando "queremos un puerto de referencia mundial (…) el puerto, insisto, es de vital importancia para nosotros, no tan sólo por su cuestión técnica, sino que, desde la perspectiva humana".

Esta valoración del Puerto, presentada por la autoridad, es justamente la que como empresa hemos querido otorgar a nuestra terminal, ícono de la identidad y del desarrollo económico de la ciudad y su gente.

Por ello que siempre he considerado que cualquier ordenamiento urbano y desarrollo económico, de una ciudad puerto como la nuestra, debe ser mirada desde el mar hacia la Cordillera y no al revés, permitiendo con ello entender la importancia y relevancia que el puerto tiene para el presente y futuro de Iquique.

Como ITI hemos estado informando de la inversión que estamos realizando y realizaremos durante los próximos años. No como una señal de ostentación, sino que muy por el contrario, como una señal inequívoca de que el puerto es y seguirá siendo motor del futuro de nuestra región de Tarapacá.

Así, entonces resulta valorable la discusión que ha generado La Estrella de Iquique en torno al daño que generan a la ciudad las movilizaciones del sector portuario, porque tal como se ha señalado, el Puerto de Iquique no tan sólo es un motor económico, sino que es parte de la identidad de todos y cada uno de los habitantes de Iquique, al cual debemos guardar el mayor de los respetos y cuidados y así permitir estructurar cambios que propendan a ser una ciudad-puerto creíble, ordenada y capaz de convivir con sus habitantes, crecimiento y medio ambiente.

Pese a los dos terremotos que afectaron a la región, los que causaron estragos en las vías de comunicación, la Zona Franca y el Puerto, además de dejar a más de 21.600 personas damnificadas, el último informe de empleabilidad del INE, muestra una recuperación del empleo.

La tasa de desocupación llegó a 5,3% y disminuyó en 0,8 puntos respecto de lo registrado en el trimestre julio-septiembre de 2013 (6,1%); además respecto al último trimestre móvil, también tuvo el mismo descenso, lo que da pie para pensar en una recuperación de la economía regional, en un momento en que hay incertidumbre a nivel país.

Si bien la tasa de ocupación llegó a 58,3%, disminuyendo 0,3 puntos en el mismo período del año pasado, a solo siete meses de los dos megasismos, el dinamismo y diversidad de polos de desarrollo, muestran una vez más, que pese a los grandes problemas, Tarapacá tiene una rápida recuperación.

Un punto importante de este informe, es que en Iquique la tasa de desocupación fue de 4,8%, también menor en 0,8 p/p que en el mismo trimestre móvil del año anterior el cual fue 5,6%; además la actual tasa de Iquique es menor en 0,5 puntos a la tasa regional.

Aunque las cifras son positivas, es necesario que tanto el sector público como privado, sigan trabajando para potenciar el desarrollo de Tarapacá y atrayendo nuevas inversiones que permitan apuntar a una economía robusta.

En este sentido es necesaria más atención a Alto Hospicio, donde la actual tasa es mayor en 1,4 p/p que la tasa regional. Pese a esto, para el trimestre actual fue 6,7%, disminuyendo en 0,4 p/p respecto a la registrada en el trimestre móvil del año anterior, la cual alcanzó a 7,1%.

Sin duda que las grandes obras de infraestructura públicas y privadas anunciadas para la región representan un aporte importante en materia de empleo, lo que es acompañado del desarrollo que pretenden impulsar. Es el caso del teleférico, el nuevo acceso a Iquique y las mejoras en el puerto y la carretera concesionada, que no solo significan un aporte a la calidad de vida de los tarapaqueños, sino la atracción de nuevos recursos.