Soñaban con ser grandes jugadores de fútbol profesional, incluso en más de una oportunidad vistieron la camiseta de Deportes Iquique en las división de menores y en la tercera división, con la gracia de estar a punto de subir al primer equipo...

Sin embargo, todos sus anhelos se truncaron producto debido a diversos errores que cometieron , donde la droga y la delincuencia estuvieron a la orden del día.

Así, Marcos Tirado y José Santos, quienes eran promesas en el balompié, ahora cumplen condenas por diversos delitos en el penal de Alto Hospicio.

Ambos recordaron su historia con la pelota, cuando participaron en la clínica deportiva que Deportes Iquique ofreció en el penal de Alto Hospicio, para un grupo de reclusos evangélicos.

En la oportunidad, Marcos y José demostraron que todavía tienen condiciones para jugar a la pelota.

El primero atajó todo como si estuviera jugando en la Tercera División por el CDI o como lo hacía en 1989 , cuando era parte de los cadetes de los Dragones.

Lo anterior muy lejano de la realidad que hoy y vive, donde ataja los tiros, pero en una cancha rodeada de cemento y rejas, custodiada por gendarmes, a causa de una hoja delictual que registra más de diez sentencias en su contra por diversos delitos.

Ya varios años ha estado así y ahora asegura que le quedan sólo 20 días para recuperar la libertad y que quiere cambiar.

'Todo mi cambio se lo debo al Señor, porque Él me cambio la vida acá. Él me está dandando una nueva oportunidad y no lo quiero defraudar', manifestó.

En la oportunidad Marcos Tirado, también habló de su pasado como potencial estrella del fútbol, donde explicó que 'era lo que más anhelaba. Quería jugar como lo hacía Alberto Erlich o como Nelson Tapia', pero lamentablemente, los amigos, que al final de cuenta no eran amigos, hicieron cambiar mi vida. Caí a las drogas y al robo sin darme cuenta comencé a delinquir para tener dinero'.

Ya en el penal asegura que se lanzó a los brazos del Señor y ahora es una persona distinta. 'Espero que la ciudadanía me de la oportunidad de reinsertarme cuando recupere mi libertad o de volver a jugar fútbol'.

Quien también quiere volver a las canchas es José Santos, un joven de 21 años que está condenado a a cinco años un día por un robo con intimidación.

Pero el asalto no fue como cualquier otro hecho delictual sino que fue contra un policía.

El ex jugador de fútbol también estuvo en las divisiones menores. Incluso asegura que jugó por Santiago Morning, pero eso no fue suficiente y corrió la misma suerte que su anterior colega de hobby.

Con plantel completo y cuerpo técnico, Deportes Iquique llegó hasta el penal de Alto Hospicio, para realizar una clínica deportiva.

Más de cien internos los recibieron con aplausos, especialmente cuando aparecieron figuras como Nelson Tapia y el técnico Nelson Acosta.

Todos querían tomarse una fotografía con ellos o conseguir un autógrafo.

Fueron cerca de dos horas que duró la actividad donde los futbolistas jugaron un partido de baby con los internos en dos equipos. Pero más allá de los goles y el buen juego, la idea era la convivencia y el fair play, lo que se ejecutó de una excelente manera por parte de los internos.

El jefe de la unidad penal, coronel Víctor Vera agradeció el gesto de los jugadores de Deportes Iquique en llegar hasta el complejo penal de Alto Hospicio. 'Es una linda oportunidad en que los internos puedan compartir con figuras del fútbol y especialmente con jugadores de Deportes Iquique'.

Mientras que el capitán del equipo, Rodrigo Naranjo señaló que 'siempre estamos dispuestos a colaborar cuando lo necesiten y en esta oportunidad compartimos con gente privada de libertad y hemos pasado un momento muy agradable'. J