Asegurando que no declinarán hasta lograr la demolición y posterior reconstrucción de sus departamentos dañados por los terremotos del 2014, ayer decenas de vecinos de los conjuntos habitacionales Las Quintas I, II y III así como de Las Palmeras protestaron exigiendo al seremi de Vivienda una inmediata solución.
Con pancartas, banderines y globos negros los pobladores se movilizaron por la calle Progreso; en tanto en la intersección con Chintaguay generaron una barricada que impidió por más de media hora el paso de vehículos con dirección al Terminal Agropecuario y ferias aledañas.
'No nos vamos sin demolición', 'Carvajal cumple tu palabra' y 'No más parches' fueron algunas de las frases que, a través de pancartas colocadas al ingreso de los conjuntos habitacionales, expresaron el malestar de más de 500 familias. Esto, porque aseguran que la Secretaria Regional Ministerial de Vivienda quiere obligarlos a reparar sus inmuebles.
'A nosotros el seremi de Vivienda en noviembre del año pasado nos dijo que si un 80% de los propietarios estaba de acuerdo en demoler los departamentos, pero ahora nos dicen que nos van a atender por un programa de reparación', dijo Maritza Quiguta, presidenta de Las Palmeras.
Los vecinos remarcaron en conjunto que, dado el estado de deterioro que tienen los departamentos por las condiciones en las que fueron construidos hace más de 30 años y los daños producidos por los terremotos del 2005 y 20014; estos deben reconstruirse y no repararse como propone la seremi de Vivienda.
'No nos han querido escuchar, desde que nos informaron el estudio que hicieron (Vivienda) y que decía que no ameritaba reconstrucción nos quieren imponer la reparación', expresó indignado el poblador Hugo Pizarro.
Por su parte el presidente de Las Quintas II y III, Sergio Hernández, remarcó que los pobladores no aceptarán otra alternativa de solución al referirse al Programa de Regeneración de Condominios Sociales que plantea la seremi de Vivienda y que pretende dar soluciones como reparación, ampliación o venta de los departamentos según la disposición y alcances que tengan los propietarios.
Los vecinos recordaron en conjunto que los 556 departamentos de los cuatro conjuntos habitacionales se encuentran dañados y que la urgencia de encontrar solución es que, frente a cualquier otro movimiento telúrico podrían colapsar y cobrar vidas.
'Queremos vivir dignamente en un lugar seguro', fue el clamor unánime de los pobladores que, tras la movilización, se concentraron cada uno en sus sectores continuando con la manifestación.
Hasta Las Quintas II y III llegó el seremi de Vivienda, Ricardo Carvajal, y el director del Serviu, Rodrigo Jara, a fin de calmar a los vecinos y explicarles las soluciones que plantean para mejorar su calidad de vida mediante la reparación de los departamentos.
Pese a ello, las autoridades no consiguieron su objetivo ya que el malestar de los vecinos pudo más al no encontrar la respuesta que ellos buscaban, como es la demolición de sus viviendas. Tras más de media hora de intentos, el diálogo se rompió entre autoridades y vecinos. J