Regalones de la semana
Estoy feliz de vivir en una familia que me ama, soy una más de sus integrantes.
Estoy feliz de vivir en una familia que me ama, soy una más de sus integrantes.
l A través de los años y con los avances de la medicina, se ha conseguido aumentar la esperanza de vida del hombre y también la de su mejor amigo, el perro.
Sin embargo, así como tiene lugar la aparición de ciertos achaques, problemas o enfermedades en la vejez del ser humano, el mundo canino no está muy ajeno a tener que enfrentar o padecer enfermedades asociadas a la tercera edad.
Los primeros síntomas externos que nos alertarán a vigilar la evolución de nuestras mascotas, serán las canas localizadas principalmente en los pies y en la parte que rodea al hocico. Junto a esto, se notará también una mayor reticencia al ejercicio físico y menos energía para movilizarse.
Sentidos como la vista y el oído cada vez serán menos eficientes, por lo que a veces nuestro perro parecerá desorientado ante nuestra llamada, tardando un poco más en reaccionar frente al estímulo.
Ante eso, no debemos pensar que nos desobedece, porque no se trata de eso.
Deberemos prestar especial atención a este punto, por ejemplo, en algo tan cotidiano como los paseos diarios, ya que el perro no sólo acusará más el cansancio, sino que cuando lo dejemos suelto y lo llamemos, quizás no nos oiga.
Para ello es fundamental que lo vigilemos constantemente cuando salgamos a la calle y que nunca lo dejemos solo, con el fin de evitar que se pierda o suceda algún accidente.
Además, es recomendable realizar constantemente visitas periódicas a su médico veterinario para realizar diferentes exámenes de rutina y así conocer realmente cual es el estado de nuestra mascota.
Una buena y adecuada alimentación permitirá que nuestra mascota resista de mejor forma su vejez y para ello es recomendable que ingieran alimentos fáciles de digerir, con alto contenido de fibra y bajo en sodio.
Así también, proporcionarle un adecuado espacio para dormir aliviará los posibles dolores que podrán tener a raíz de la artritis.
Siempre se han tratado de comparar los años humanos con los años caninos pero, es una discusión a la que aún no se ha llegado a puerto, por lo que sólo nos podremos referir a que los perros son cachorros hasta el año de edad aproximadamente.
Entre el año y los siete años son adultos y posterior a eso ya son llamados seniors o viejitos. Los perros de raza tienen un factor genético decisivo en su longevidad.
Por norma general, una raza pura de perro disfruta de una vida más corta que los ejemplares que han surgido de cruces entre diferentes razas.
Tradicionalmente, los perros mestizos resisten mejor las enfermedades y viven más. J