El concepto Alto Hospicio tiene una dimensión social, pero a la vez histórico, que tiene su comienzo y es vinculado a un modelo de explotación que data de épocas coloniales y configura un escenario económico regional dentro de una periferia productiva centrada en la minería extractiva, del antiguo Virreinato del Perú y antes de ello al Kollasuyu de los Incas.

El espacio actual de la comuna no es ocupado, pero si sus alrededores y otros cercanos por posteriores campamentos mineros, estación y vías de ferrocarriles en Alto Hospicio y los Molles e instalaciones industriales que serán parte del hinterland que se genera en torno al eje de producción del llamado ciclo de la plata norte.

El primer asentamiento tiene su origen en el sitio de Huantajaya y sobre éste, se genera un circuito local de extracción de estas minas aledañas de Alto Hospicio, que se convierten en un insumo más en la producción de plata de la economía del Virreinato del Perú.

Luego de los primeros siglos (XVI, XVII), los mineros se convierten en criollos con una identidad que los transforma en tarapaqueños hacia el siglo XVIII, ésta entidad se personifica en don Bartolomé De Loayza y Valdés y don José Basilio de la Fuente, que explotaron los minerales de Huantajaya y Santa Rosa.

Alto Hospicio, tiene por tanto un pasado productivo minero, que tal vez, no sólo sea español, sino indígena. No es menor la incidencia de cuerpos momificados en el cerro Esmeralda de origen Inca y son éstos, el primer indicio de un espacio productivo que se mantendrá del siglo XVI al XIX y con ello el foco de atracción a una población primero indígena, luego hispana, criolla y mestiza que seguirá con el ciudadano peruano del siglo XIX y el chileno del siglo XX.

El habitante de Alto Hospicio al estar situado en un piso ecológico superior a la costa, la llamará hasta ahora como "pampa", dado que serán parte del primer escalón geográfico a pesar que en sí la comuna actual se ubica en la cordillera de la costa, sin embargo, se acogerán a un espacio sociológico y productivo que es la pampa.

En el marco de la celebración del Día Mundial del Agua, realizada este fin de semana, el Gobierno a través del ministro de Obras Públicas anunció el inicio de un trabajo conducente a establecer una política nacional respecto a la desalinización, como una de las alternativas concretas más importantes para paliar el déficit hídrico presente o previsible en nuestro país.

Según consigna el diario El Mercurio en su edición del lunes, el titular del MOP Alberto Undurraga reconoció que las desaladoras son necesarias, como lo está constatando en estos momentos la comunidad de Atacama y en particular la de la cuenca de Copiapó, y agregó que estos proyectos también son necesarios "en otras cuencas del país y en eso estamos trabajando y ya se comunicará".

Lejos de estar enfrentando una circunstancia, Undurraga explicó que el fenómeno de la sequía llegó para quedarse y ante este hecho, se deben tomar medidas. "Debemos ser capaces como país de tener agua", declaró el ministro. y efectivamente es así.

Entre la sequía, mala administración y la falta de criterio y regulación en la entrega de derechos de agua, como ocurrió en el caso de la cuenca de Copiapó, los valles de Chile se están secando, en un fenómeno que desde el norte grande ahora se extiende hacia la zona sur.

Todo muestra que es el Estado el que debe tomar un mayor protagonismo a la hora de resolver el problema hídrico que hoy enfrenta al país y que tiene múltiples aristas y alcances. La construcción de desaladoras en lugares paradigmáticos como Antofagasta y ahora Copiapó, es una muestra de la necesidad que existe de atender las diversas aristas que tiene el desafío del suministro, considerando la industria, la agricultura y el consumo humano.

Pero es en este último punto donde más se requiere del protagonismo del Estado. Hasta ahora, una planta desaladora significa alzas en las cuentas de agua y por lo pronto, parte de los costos deben ser asumidos por la comunidad. Una realidad que se espera, pueda ser analizada bajo esta nueva política anunciada por el ministro.