Deportistas aún sufren consecuencias del sismo
El deporte no estuvo ajeno a las dificultades que dejó el terremoto del 1 de abril y sus posteriores réplicas. El evento sísmico produjo consecuencias que afectaron a miles de deportistas que hasta el día de hoy presentan huellas permanentes en la actividad local.
Álvaro Cortez, joven atleta que recientemente realizó récord nacional en Salto Triple y que se alza como una de las grandes promesas del atletismo en Chile, se las arregla como puede, pero teme por su futuro. 'Hasta ahora no me han dado solución para entrenar si el estadio entra en reconstrucción. Para mis entrenamientos necesito mínimo una recta de 50 metros con un foso de caída y si no tengo una solución tendré que irme de la ciudad', mencionó Cortez.
Tal como Álvaro está la Asociación de Béisbol de Iquique, que a través de Gustavo López, actual entrenador de la selección chilena de Softball no encuentra solución para el uso del 'diamante'.
'El terremoto fue en abril y nosotros regresamos a la cancha recién en noviembre, porque estaba ocupada por el Comité de Emergencia (COE), pero hoy nuevamente no podemos usarla porque el COE volvió a instalarse ahí', menciona López, quien comentó que tuvieron que trasladarse a las canchas del cerro Dragón para poder entrenar.
Hoy, la preocupación de López es mayor, debido a que hay cinco seleccionadas nacionales de Iquique, perjudicadas por la falta de una cancha. 'Tengo que preparar a las chicas porque el 1 de mayo nos vamos a juntar en San Antonio, pero las niñas no han podido entrenar como corresponde, yo creo que van a llegar disminuidas a la concentración'.
En Alto Hospicio hay un conflicto no menor. Luego que la liga de Canadela cediera su cancha para instalar un campamento de emergencia, les fue cedida una cancha en La Quebradilla que, normalmente, utiliza la Liga Infantil de la zona, generando descontento en los dirigentes y apoderados que ven una injusticia en el caso.
'Entendemos la buena obra de la gente de Canadela al ceder su espacio, pero ¿por qué quitarnos esa cancha a nosotros y no entregarles otro lugar?', es la principal pregunta que genera Luis Silva, presidente de la Asociación de la Liga Infantil que pertenece a la Asociación Nacional de Fútbol Amateur.
'Legalmente no somos dueños del terreno porque no hay ningún documento que diga que lo compramos, pero nosotros pensábamos que por respeto a los más de 12 años que estamos ahí y porque son niños a los que están sacando de la cancha, no nos iban a quitar el lugar' declaró.
Son 800 niños los que juegan en el sector de La Quebradilla, en seis categorías, donde tres juegan en diferentes turnos en una cancha y las tres restantes en la segunda cancha que fue cedida a Canadela. J